viernes, 21 de enero de 2011

Los pinches tiranos


Como están las cosas, este hombre es tu amo porque sus modos malvados ejercen una influencia desfavorable sobre ti.
Libro de Urantia. Pág.1430

Esta cita está en el contexto de una conversación de Jesús con un joven griego que le dijo: «Si los Dioses se interesan en mí ¿por qué no alejan al capataz cruel e injusto que está a cargo de este taller?» Se sorprendió cuando Jesús replicó: «Puesto que conoces los caminos de la amabilidad y valoras la justicia, tal vez los Dioses han puesto este hombre equivocado cerca de ti para que le conduzcas por un mejor camino. Tal vez seas tú, la sal que ha de hacer a este hermano más agradable para el gusto de todos los demás hombres; es decir, si no has perdido tu sabor. Así como están las cosas, este hombre es tu amo, porque sus malos modos ejercen una influencia desfavorable sobre ti. ¿Por qué mejor, no afirmar tu señorío sobre el mal por virtud del poder de la bondad, convirtiéndote así tú en el amo en toda relación entre vosotros dos? Puedo predecir que el bien que hay en ti podría vencer el mal que hay en él si le dieras una oportunidad ecuánime y viva. No hay aventura más apasionante en el curso de la existencia mortal que el regocijo de actuar como socio de la vida material que se une con la energía espiritual y la verdad divina, en una de sus luchas victoriosas contra el error y el mal. Es una experiencia maravillosa y transformadora tornarse en el canal viviente de la luz espiritual que ha de iluminar al mortal que permanece en la oscuridad espiritual. Si estás más bendecido con la verdad este hombre, debería ser para ti un desafío.1430

Si pensamos que nada ocurre por casualidad, cada vez que en nuestro camino nos encontremos con un "pinche tirano" con alguién que nos saca de nuestras casillas, ya sea por sus insultos, descalificaciones u ofensas, deberíamos recordar estas respuestas de Jesús y calmar a nuestro ego para que en vez de salir a defenderse en forma airada, se detenga a pensar que es lo que la Maestra Vida nos quiere enseñar, recordando que Jesús vino a abolir la ley antigua del ojo por ojo, diente por diente y a cambio "vosotros devolveréis el bien por el mal, porque mis mensajeros no deben luchar con los hombres, sino tratarlos con dulzura.1577"

Por supuesto que el actuar así requiere de todo nuestro autodominio, para controlar nuestro enojo y especialmente nuestra lengua, lo cual no es fácil por eso, "muy pocos hombres la pueden domar, pero el espíritu interior puede transformar este órgano poco dócil, en una dulce voz de torlerancia y misericordia.1640

Nadie nos puede herir, si nosotros no lo permitimos, si somos capaces de mantener la calma e ignorar lo que ocurre. Porque cuando nos enojarnos y enganchamos con las ofensas, nos estamos haciendo voluntariamente prisioneros de ellas y de quien las emite. Les estamos permitiendo que controlen nuestro carácter y hasta nuestra vida, porque "la impaciencia es un veneno para el espíritu y la ira es como una piedra arrojada a un nido de avispas.557 se sabe como comienza, pero no como puede acabar.

"La ira es una manifestación material que representa, de manera general, la medida del fracaso de la naturaleza espiritual, en la tarea de ganar el control sobre las naturalezas intelectual y física combinadas. La ira indica vuestra falta de amor fraternal tolerante más vuestra falta de respeto propio y de autocontrol. La ira afecta la salud, envilece la mente, y limita al instructor espiritual del alma del hombre. ¿Acaso no habéis leído en las Escrituras que `la ira mata al tonto', y que el hombre `se destruye a sí mismo en su ira'? ¿Que `el que tarda en airarse es grande de entendimiento', mientras que `el que es impaciente de espíritu enaltece la necedad'. Todos vosotros sabéis que `la blanda respuesta quita la ira', y que `las palabras ásperas hacen subir el furor'. `Los hombres iracundos levantan contiendas, y los furiosos multiplican sus errores'. `No te apresures en tu espíritu, porque el enojo reposa en el seno de los necios'». Antes de terminar de hablar Jesús también dijo: «Dejad que vuestro corazón esté tan dominado por el amor, que el espíritu guía pueda con poca dificultad libraros de la tendencia a dejaros llevar por esas explosiones de ira animal que son inconsistentes con el estado de filiación divina.1673"

Nada desarma y desconcierta más a un adversario, que el no encontrar a un contrincante, sino a un hermano que es capaz de contestar con serenidad y amor. Que el enojo de los demás sea para nosotros un desafío para ejercer nuestra empatía y comprensión, si logramos hacerlo, saldremos airosos de cualquier combate y habremos actuado como hijos legítimos de Dios, porque no se trata de reprimir el enojo, sino de sobrepasarlo con inteligencia y espiritualidad.

yolanda silva solano

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