viernes, 30 de octubre de 2009

La comprensión es la auto-reflexió n evidente del Ser



La comprensión es la auto-reflexió n evidente del Ser.
Samael Aun Weor
En los infiernos atómicos, debemos desintegrar los cadáveres del Ego a punta de fuerza eléctrica. Nunca debemos esperar que el tiempo los desintegre.
El karma crea cuerpos. No vuelvas nunca a crear cuerpos físicos, son vulnerables, están expuestos a la vejez y a la muerte.
La auto-autoridad no es posible cuando no se posee la verdadera autoridad dentro de sí mismo. ¿Cómo se va a poseer autoridad si no se es dueño de sí mismo?
Actualmente, la mente humana está degenerada por aquello del concepto. Todo concepto emitido es el resultado de lo que han dicho, de lo que se ha estudiado.
El auto-concepto se basa en la experiencia y en la propia forma de pensar.
Krishnamurti sí tiene auto-conceptos porque nunca ha leído a nadie.
Los conocimientos de Gurdieff son incipientes.
La auto-acción sólo puede ser posible cuando se tiene al Ser adentro.
Existencia, persistencia y aburrimiento del Yo, ¡reflexionad!
El Yo es una simple posición absurda en el infinito...
El punto se convierte en línea, la línea en superficie y ésta en cuerpo. Substituye al punto por el Yo, y empezarás por no entender a la creación.
Reflexionad sobre el séptimo sello del Apocalipsis.

libro: Para los Pocos del Maestro Samael Aun Weor

jueves, 29 de octubre de 2009

MANUEAL DE SABIDURIA



ES EL MOMENTO DE SER FELICES
MANUAL DE SABIDURIA
Un sabio padre dejó de herencia a su hijo un bello manual de vida, producto de la experiencia de una existencia bien vivida. Éste comenzaba diciendo:

1. Trata de que siempre te recuerden como el mejor amigo.
2. Nunca dejes pasar la oportunidad de salir a pasear.
3. Trata siempre de levantar tu cara para experimentar
la sensación del aire fresco y del viento en tu rostro.
4. Cuando veas a alguien que quieras,
corre siempre entusiasta a saludarle.
5. Practica siempre el respeto, la tolerancia,
la lealtad y la obediencia.
6. Siempre que puedas, duerme una siesta
y estírate antes de levantarte.
7. Muéstrate alegre y entusiasta,
baila, corre y juega diariamente.
8. Sé siempre leal,
sin importar las circunstancias.
9. Nunca pretendas ser lo que no eres,
porque quedarás en ridículo.
10. Si lo que deseas está lejos,
fija tu vista en lo que quieres,
espera la oportunidad y ve corriendo hasta encontrarlo,
no lo dejes escapar.
11. Hazte respetar,
deja que los demás sepan
cuándo están invadiendo tu territorio
12. Cuando alguien querido esté triste o alterado,
no digas nada, sólo míralo con amor
y siéntate cerca de él,
acompañándolo sin molestar.
13. Cuando alguien
te dirija unas palabras de reconocimiento
o te toque con cariño,
reacciona con entusiasmo
y demuestra tu agrado.
14. Come siempre con gusto y entusiasmo,
pero detente cuando estés satisfecho.
15. Evita morder a los demás
cuando tienes problemas.
16. Siempre guarda algo para el futuro,
y cuando lo necesites cava hasta encontrarlo.
17. En los días cálidos,
acuéstate sobre tu espalda en la grama
y disfruta del sol en tu cara.
18. Bebe mucha agua,
y cuando te sientas cansado
busca tu rincón preferido
para tomar un descanso.
19. No importa cuantas veces seas censurado,
no asumas ningún rencor
y no te entristezcas.
20. Mantente siempre alerta,
pero tranquilo.
21. Primero siempre tu familia
y los amigos.
22. Sé consciente de la fuerza de tus dientes,
pero por ningún motivo
los uses con tus personas queridas.
23. Los amigos de tus amigos
siempre serán tus amigos.
24. Sé delicado, paciente y protector de los niños,
los ciegos y las personas mayores.
Con amor, de tu padre que te ama.

Siempre tenemos la posibilidad de volver a empezar;
es decir, pasar la página para separar el pasado del presente
y tomar la decisión de renovar nuestro estilo de vida.
Aprende a disfrutar cada momento, sin esperar a que sucedan eventos extraordinarios como ganarte una lotería o recibir una herencia. Tampoco pienses que para ser feliz necesitas graduarte, casarte o tener hijos .
Este es el momento para cambiar de actitud y comenzar a disfrutar de la vida.
¡Mereces ser feliz!
Quítale importancia a las cosas que no la tienen,
toma el control de tu vida y haz uso de tu poder de elegir;
evita vivir para complacer a otros y sé tú mismo.
Tengo una amiga muy especial, alegre y entusiasta,
que siempre me decía, a manera de broma,
que tenía un pote de pintura rosada con el que pintaba cada situación difícil para afrontarla. Al igual que ella podemos tener nuestros recursos para minimizar la dificultad, de manera que podamos resolverla y superarla más fácilmente.
Podemos elegir cuáles van a ser las reglas
para hacer nuestro manual de vida,
qué herramientas usaremos para manejar las situaciones
que se nos presenten y con qué actitud las afrontaremos.
Nuestro bienestar depende, en gran medida,
de lo que pensamos, sentimos y hacemos.
Procuremos ser coherentes,
de manera que nos convirtamos en una causa
que genere o atraiga los efectos que deseamos vivir.
Hoy puede ser el primer día del resto de nuestra vida,
no permitamos que nada ni nadie nos robe la posibilidad
de sentirnos bien con nosotros mismos,
con la vida que llevamos
y con quienes la compartimos.

¡Suelta el pasado,
deja de preocuparte por el futuro,
vive el presente,
la vida es maravillosa,
todo va a estar bien!

LA DIVINIDAD SIEMPRE CONSPIRA
PARA BRINDARTE EL APOYO, LA GUÍA Y LA PROTECCIÓN
QUE NECESITAS

Pedagogía del Crecimiento Interior


CANALIZACIONES RECIENTES
0910 MAESTRO SALONIS

Pedagogía del Crecimiento Interior (Octubre 2009)

Que la conexión con la Fuente Divina sea el centro y finalidad de vuestra vida y actividades, para sintonizar con la corriente de vuestra esencia de luz que viaja en las múltiples dimensiones de la evolución cósmica.
A través de estos comunicados interdimensionales estamos creando una plataforma de formación espiritual que os ayude a comprender quiénes sois, qué debéis hacer y hacia dónde vais. Aunque en términos generales tenéis información de conceptos espirituales, no quiere decir que tengáis conocimiento espiritual ni lo hayáis integrado en vuestra vida. Si analizáis de forma imparcial y objetiva la dinámica de vuestra vida, descubriréis determinados aspectos de ella que son disonantes y vibran en frecuencias muy bajas y negativas. Los conflictos que tenéis son dispositivos que el universo y vuestro Ser Esencial utilizan para mostraros el camino y los aspectos del trayecto evolutivo que debéis modificar. Os habéis vuelto adictos a la “Información Espiritual” sin comprender cuál es el objetivo de esa información, y aprender a discernir entre información que aporta crecimiento espiritual de la que es meramente informativa. Vuestra faceta humana mediatizada por el ego mental fluctúa constantemente en parámetros donde la especulación, la imaginación y distorsión de la realidad dirigen vuestra vida. Creáis burbujas o dinámicas de vida ficticias nutridas por falsas expectativas que os acaban frustrando y desalentando.
La vida, como fenómeno evolutivo, es el mecanismo que el Creador Infinito ha diseñado para ayudarnos a comprender nuestra naturaleza divina, inmortal y eterna, eclipsada por una percepción errónea de la realidad. Son muy pocos lo que están interesados en la realidad, porque implica compromiso personal, trabajo interior, perseverancia y una gran dosis de honestidad y sinceridad. Vuestros objetivos espirituales no están definidos, y fluctuáis en las corrientes mentales que son inestables y oscilantes. Por eso, la incertidumbre y la ansiedad son la tónica dominante en vuestra vida. El crecimiento espiritual no es un aspecto secundario de la vida que, como objeto de ocio, se utiliza para cubrir el vacío, la confusión y la inconsciencia en la que habitualmente vivís. Por el contrario, el crecimiento espiritual es el fundamento de vuestra vida porque en esencia vuestro ser de luz es el objeto de la vida y, como una manifestación de Dios, debéis recuperar vuestro estatus divino para experimentar la inmortalidad y la dicha infinita. Sois seres de luz que estáis navegando en las olas del tiempo cósmico sin saber hacia dónde vais ni por qué tenéis que experimentar tanta tribulación, confusión y sufrimiento. La causa de ello es la inconsciencia, producto de la disociación con Dios y de las leyes de la vida y la evolución.
Como partículas de luz inmortal que sois tenéis el deber de vibrar en la frecuencia divina más allá de las limitaciones de la mente, del cuerpo físico, del espacio-tiempo relativo en el que vivís y bajo paradigmas existenciales erróneos. La finalidad de la vida y la evolución no es mejorar vuestras condiciones de vida en el planeta Tierra, o ser transferidos a mundo superiores, sino reconectaros con Dios. Todo el proceso cósmico en constante mutación, y bajo la supervisión de axiomas fundamentales evolutivos, tiene como finalidad el despertar vuestra sensibilidad espiritual y la conexión eterna e indisoluble que tenéis con el Creador Infinito.
Todavía no habéis comprendido que vuestra expresión humana en el planeta Tierra es una manifestación efímera de vuestro Ser Esencial, que está viajando en el espacio-tiempo cósmico buscando niveles de perfeccionamiento espiritual superior. Vuestra misión y responsabilidad no depende de lo que hagan los demás, ni lo que pueda suceder geofísica, geomagnética o socialmente. En el transcurso de la historia del ser humano en la Tierra han sucedido eventos catastróficos; sin embargo, la humanidad continúa experimentado ciclos evolutivos distintos sin comprender el origen de su existencia y el objetivo de la vida.
Los medios de información son el emblema de la negatividad, inconsciencia, confusión y caos que hay en vuestro planeta. Las guerras, violencia, pobreza, destrucción, problemática ambiental, crisis económicas, tensión política internacional, etc., son la síntesis de una civilización decadente y enferma que no ha comprendido la esencia de la vida y la evolución cósmica. Todos estáis muy ocupados en resolver vuestras necesidades básicas de supervivencia, restando prioridad e importancia al crecimiento interior, que es algo secundario en vuestra vida. Lo que sucede en vuestro planeta es el reflejo de vuestras mentes eclipsadas por conceptos erróneos, tendencias perniciosas que atentan contra la vida del planeta y del bienestar psicológico, energético y fisiológico de vuestros cuerpos. La mayoría de la información que recibís es nociva, y fomenta separación, egoísmo, explotación, manipulación, violencia y destrucción. Incluso a nivel espiritual sois incapaces de pulir vuestros egos que siempre están a la defensiva y dispuestos a defender su territorio. Ni siquiera sois capaces de respetar y colaborar con personas que puedan tener una visión y conocimiento espiritual distinto al vuestro.
Estáis esperando que suceda algo mágico para que, de forma rápida y con el menor esfuerzo, se produzca el cambio interior, lo cual es una utopía por vuestra parte. ¿Os habéis preguntado alguna vez si estáis dispuestos a despojaros de las facetas humanas que generan conflicto, sufrimiento, inconsciencia, manipulación y explotación? Utilizáis con frecuencia términos como el amor, la paz, la luz, pero son meras palabras cuyo significado real desconocéis, porque estáis atrapados en los intereses personales, donde el egocentrismo se disfraza circunstancialmente de luz, amor, solidaridad y colaboración fraternal. La pedagogía del crecimiento interior implica una profunda reflexión, discernimiento, introspección y praxis espiritual. Con frecuencia os disipáis en la corriente de las trivialidades del mundo en el que vivís, y de vez en cuando invertís un breve espacio al trabajo interior, aunque en realidad es más autocomplacencia que desafío espiritual, que implica alerta, perseverancia, concentración e integridad.
Sin pedagogía del crecimiento interior no lograréis superar el velo de la inconsciencia, autoengaño, limitaciones y conflictos internos que implacablemente os hostigan. El crecimiento espiritual no es una opción o un aspecto lúdico y secundario de vuestra vida, sino “La Esencia de Vuestra Vida”. Mientras no comprendáis esto seguiréis navegando en el laberinto del ego mental, cuyas autopistas son múltiples y que restan vuestra energía y tiempo para indagar y experimentar la alquimia del crecimiento interior. Como esencias divinas de luz inmortal que sois, es vuestro deber comprender la relevancia de impulsar vuestro crecimiento espiritual, sin lo cual la vida humana deja de tener sentido y descendéis al nivel de las especies irracionales, donde la lucha por la supervivencia del más fuerte es la esencia de sus vidas.
Es importante que comprendáis la gran responsabilidad y compromiso que tenéis con la vida, la evolución y con Dios, que os ha bendecido con la inteligencia humana para comprender el viaje enigmático de la vida y descubrir el origen de vuestra existencia y vuestra naturaleza divina. El buscar un nivel de vida mejor no os cataloga como “Seres de Luz”, sino como “Ser-Es Humanos” carentes de sensibilidad espiritual, que es la característica relevante del ser humano y que no tienen las especies de vida inferiores. Vuestro Ser de Luz no tiene ningún vínculo con el plano físico y mental en el que vivís, sino con el plano divino, donde los parámetros son distintos. Sois esencias divinas atrapadas en la turbulenta espiral de la percepción errónea de la realidad. No conseguiréis trascender el velo de la realidad ficticia en la que vivís mientras no os conectéis con vuestro Ser de luz, mediante la pedagogía del crecimiento interior, que implica dedicación, consciencia, esfuerzo, compromiso, tiempo, disciplina, metodología y mucha integridad y sinceridad.
El objetivo de vuestra estancia en el planeta Tierra no es disfrutar de mejores condiciones existenciales, sino iluminar la oscuridad que oculta y enmascara vuestra identidad espiritual. Desperdiciáis mucho tiempo en aspectos banales, e inconscientes de la repercusión que tendrá en vuestra vida. El viaje de la evolución espiritual es arduo y complejo, y se requiere de una gran determinación, inteligencia y sensibilidad espiritual. Nuestro objetivo es fomentar sensibilidad, consciencia y discernimiento para que paulatinamente, y con las directrices correctas, podáis descubrir la luz que hay en vuestro interior y la conexión intrínseca que tiene con Dios. La felicidad y prosperidad que tanto anheláis no depende de las estrategias y recursos materiales que tengáis, sino de vuestro despertar y crecimiento espiritual, que utiliza parámetros y frecuencia vibratoria distintos. Cuanto más os sintonicéis con la pedagogía del crecimiento interior, más comprensión, fuerza, inteligencia, armonía, bienestar y prosperidad tendréis. Todas estas facetas son una consecuencia adicional de vuestra conexión con el plano divino, que de forma natural se manifiestan en vuestra vida.
El objeto de nuestros mensajes es inspiraros y marcaros las pautas para que no os desviéis ni confundáis. A veces pueden tener una connotación recriminatoria, pero el trasfondo es el deseo de ayudaros y el amor que os profesamos, porque sois miembros de la familia cósmica y deseamos ayudaros a crecer espiritualmente.

EL ADVENIMIENTO DE LAS ESCUELAS DE MISTERIOS


EL ADVENIMIENTO DE LAS ESCUELAS
DE MISTERIOS... Y(II)

Paulatinamente, fue produciéndose una separación en las Escuelas de Misterios. El
fervor y propósito de los sacerdotes de propagar sus doctrinas, en muchos casos excedió
aparentemente su inteligencia. De resultas de esto, se permitió a muchos aspirantes entrar
en los templos antes de que realmente estuviesen preparados para la sabiduría que debían
recibir. El resultado fue que estos espíritus poco preparados, fueron ganando gradualmente
más autoridad, pero se manifestaron al fin incapaces de mantener la institución, siendo
ineptos para establecer relación con los poderes espirituales que se hallan detrás de toda
empresa de orden material. Y de este modo, las Escuelas de Misterios fueron
desapareciendo. La Jerarquía Espiritual, servida a través de todas las generaciones por un
número limitado de seguidores veraces y fieles, se desvaneció de la faz de la Tierra.
Mientras las colosales organizaciones de orden material, habiendo perdido el contacto con
sus fuentes divinas, comenzaron a perder el rumbo y se fueron enredando cada vez más en
ritos y símbolos los cuales ya no podían interpretar.
Un ejemplo concreto e interesante de la deterioración de las Escuelas de Misterios y
sus ritos se halla en el juego de niños llamado La Comedia de Punch and Judy. Durante
siglos la gente superficial de todas las naciones de Occidente rió con las curiosas travesuras
de estas pequeñas figuras. El mundo hace tiempo que ha olvidado que este juego se originó
entre los primeros místicos cristianos; Punch era Poncio Pilatos y Judy era Judas Iscariote.
El pequeño garrote que lleva Punch es una réplica degenerada de los antiguos cetros de los
dignatarios romanos de la Tierra Santa. También es probable que la famosa escena entre
Punch y el niño haya sido tomada de la antigua historia cristiana del degüello de los
inocentes.
Es realmente digno de notarse cómo a través de las edades, sea por transmisión oral,
sea por alegorías o símbolos, sea por ejemplos naturales, las verdades reveladas a los
antiguos se perpetuaron hasta nuestros días, a pesar de que siempre fueron ocultadas a los
ojos de los profanos. Se ha dicho que la sabiduría no está en ver las cosas, sino en ver a
través de las cosas. Al menos para el ocultista, esto es doblemente verdadero.
Durante la era de Atlántida, que describe Platón, la tarea de recopilar y ordenar la
Antigua Sabiduría se llevó a cabo aceleradamente, pues los pobladores de la Atlántida
fueron los exponentes más grandes de pensamiento concreto que jamás conoció el mundo.
Los habitantes de la Atlántida jamás entendieron a fondo la sabiduría que les era propia,
pues aún en aquellos tempranos tiempos los dioses ya se habían retirado de la masa de la
humanidad y sólo hablaban a los hombres a través de sacerdotes y oráculos. El método de
comunicación de que se valieron los poderes espirituales se halla fielmente expuesto por
Josephus en su descripción del Arca de la Alianza y de los sacerdotes que la servían. Esta
arca era un oráculo, y los dioses hablaban al sumo sacerdote por medio del lenguaje de los
símbolos. De los habitantes de la Atlántida, con sus Antiguos Misterios del Tabernáculo,
hemos rescatado casi todo lo que sabemos en lo referente a la Sabiduría Antigua y sus
Misterios. De acuerdo con el Libro Sagrado, ellos eran los custodios de los registros
espirituales que les habían sido dados por sus progenitores, los Reyes Serpientes, que
reinaron sobre la Tierra.
Fueron estos Reyes Serpientes, quienes fundaron las Escuelas de Misterios, los
cuales más tarde aparecieron como los Misterios Egipcios y Brahmánicos y bajo otras
formas de ocultismo antiguo. Su símbolo era la serpiente, porque enseñaban a los hombres
a usar la energía creadora que corre por la naturaleza y por sus propios cuerpos, en forma
de línea “serpenteante” o de fuerza “sinuosa”. Eran los verdaderos Hijos de la Luz, y de
ellos descendió una larga línea de adeptos e iniciados debidamente instruidos en la ley.
Éstos mantuvieron encendida la luz de las verdades divinas a través de muchas
generaciones de ignorantes y descreídos. El mundo Atlántida se vino abajo en cuanto se
apartó de la ley. Olvidó que la naturaleza es la regidora de todas las cosas y, por querer
vivir antinaturalmente, fue destruido. Antes de su desintegració n, como quiera que sea, la
Sabiduría Antigua pasó al nuevo mundo de los arios, donde, desde el corazón del
encumbrado Himalaya, sus adeptos, e iniciados comenzaron el proceso de la formación de
un nuevo pueblo destinado a ser el tabernáculo viviente de los dioses.
No siempre el hombre fue un ser material. Hace muchas eternidades era una criatura
espiritual, de poderes radiantes y gloriosos. Gradualmente fue tomando la vestidura de lo
que nosotros llamamos “cuerpo”, y su radiosidad fue empañada, por las envolturas de
arcilla. Poco a poco fue perdiendo el contacto con sus Padres, los Hijos de la Luz, y
comenzó a moverse en las tinieblas. En la época en que el tercer ojo se cerró en el hombre,
durante el antiguo mundo de los Lemures, el género humano perdió el contacto con sus
maestros invisibles. El recuerdo de los maestros se fue esfumando de a poco, hasta que sólo
quedaron mitos y leyendas. La mitología es el registro auténtico de aquellos períodos de
transición en que las chispas divinas fueron asumiendo gradualmente las formas del cuerpo
mortal.
Pero el hombre jamás ha sido dejado peregrinando a solas en su ignorancia. Cuando
se rompieron los lazos que lo unían a los mundos invisibles, ciertos métodos para captar la
voluntad de los dioses, fueron establecidos. Fue entonces, y a estos efectos, que cierta
cantidad, de hombres y mujeres fue instruida en la transposición del abismo que ya
separaba a los hombres de los dioses. El método para establecer esta comunicación era el
máximo de los secretos del ocultismo antiguo. Este secreto fue conservado para la raza
humana, pues llegará el tiempo en que todos los seres humanos volverán a ser capaces de
comunicarse otra vez directamente con los dioses. Durante un gran intervalo de edades,
esta sabiduría fue perpetuada en las Escuelas de Misterios, y un pequeño grupo de
discípulos elegidos en cada generación tuvo el privilegio sagrado de conocer a los dioses.
Esta sabiduría y el poder y conocimiento que tales discípulos han alcanzado, éstos la
imparten, a su vez, a otro grupo de discípulos elegidos y amados. Y así la gran obra sigue
adelante.
La capacidad de las Escuelas de Misterios, de comunicarse con los mundos
invisibles, es la base de su poder; pues todas las jerarquías creadoras residen en los mundos
invisibles, y es a estos mundos adonde deben recurrir los discípulos para consultarlas. La
explicación está en que el género humano es el único, dentro de nuestra organización, que
se halla equipado con un cuerpo físico y un, cuerpo mental. Los dioses propiamente dichos,
jamás han descendido a la sustancia física. De modo que al no tener cuerpo compuesto del
elementos químicos densos, no pueden manifestarse aquí. Para comunicarse con ellos, los
seres humanos tienen, pues, que aprender a funcionar conscientemente en sus propios
cuerpos invisibles. Cuando el ser humano alcanza a hacer esto, puede comunicarse con los
seres espirituales que residen en sus sustancias similares de carácter ultrafísico. Es así que,
mientras la religión trata únicamente de fantasías, teorías y creencias, los iniciados de la
Antigua Sabiduría se dirigen derechamente a la fuente principal de sabiduría y, conociendo
la voluntad de los dioses, hacen de esa voluntad la ley de sus vidas. El iniciado ni adivina,
duda, ni habla a solas. Trabaja con hechos, pues se siente uno con las verdades de la
naturaleza.
Este sendero secreto de la iluminación espiritual es el camino que estableció el
Logos planetario, al estatuir que Sus hijos aprenderán a conocer a través de Él y a cumplir
Sus fines. El Logos está rodeado de una jerarquía de seres sobrehumanos y también de un
grupo de grandes iniciados que pueden ser llamados el fruto del período del mundo
humano. Estos grandes iniciados, con sus mentes divinamente inspiradas forman los
poderosos pilares de la Casa de su Dios. Son los soportes del Templo del Progreso
Humano. Estos grandes espíritus fueron llamados por los antiguos místicos judíos los
“cedros del Líbano”. Son estos los árboles que se dice que cortó Salomón de los bosques de
la tierra para usarlos como soportes de su templo divino.
Las verdades secretas de estos iniciados fueron recopiladas del norte, del este, del
sur y del oeste. Los adeptos y místicos de todas las naciones dieron a sus discípulos los
frutos de sus investigaciones mientras funcionaban en los mundos invisibles. Las Escuelas
de Misterios, cumpliendo la antigua ley, han sido hechas a imagen de la Naturaleza, y hoy
día las conocemos bajo el nombre de las Siete grandes Escuelas de Misterios. Todas estas
son ramas de un mismo árbol, el árbol que crece en el centro del Huerto del Señor, y es
regado por las aguas de los cuatro ríos (la sabiduría de los cuatro mundos). Del mismo
modo en que todo rayo de luz se descompone en siete colores cuando atraviesa el prisma,
esta antigua verdad, al atravesar el cuerpo prismático del mundo material, se descompone
en un cuerpo séptuple. Este cuerpo es la así llamada serpiente de siete cabezas, pero,
aunque habla a través de siete bocas, no tiene más que un cerebro, una vida, un origen.
Los sacerdotes de los Misterios se simbolizaban como serpientes, llamadas a veces
hidras. De aquí se deriva la palabra (inglesa) hydrant (= boca de riego). La boca de riego
lleva el agua, y, a través del cuerpo de hidra del iniciado, pasa el agua de la vida. De ahí
que el iniciado sea como un tubo o canal a través del cual pasa el agua como a través de la
boca de riego (hydrant).
Estas siete escuelas, compuesta cada una de doce iniciados y sus discípulos,
dispuestos alrededor de un decimotercero hermano “excelso”, son los perpetuadores,
ordenados por Dios, de la Antigua Sabiduría, en la forma en que vino en la alborada del
mundo, cuando los dioses descendieron de la nebula del sol y fijaron su residencia en la isla
sagrada del polo norte.
No estando destinado este escrito a fines de propaganda, no nombraremos a ninguna
de estas escuelas, pero sí diremos que representan a los planetas y los siete grandes
senderos. También representan los siete órganos vitales del cuerpo humano y las siete
redomas que vuelcan su contenido sobre el mundo. Todos los discípulos que buscan
adquirir conocimiento de las leyes; de la naturaleza, tienen que obtener tal sabiduría a
través de uno de estos siete canales, dispuestos por el Infinito para el desenvolvimiento de
Sus tareas. Cada una de estas Escuelas de Misterios es invisible y desconocida. Sólo se las
podrá encontrar al cabo de largas búsquedas y repetidas desilusiones. En reconocimiento a
la dignidad de estas escuelas y a la santidad de la sabiduría que ellas representan, este
escrito ha sido preparado con el fin de reproducir de manera simple alguna de las verdades
maravillosas que tales escuelas sustentan.
Cada cien años, se oye la voz de la Gran Escuela y viene al mundo alguien para dar
testimonio de lo invisible. Ese “alguien” habla con la voz de la sabiduría y es amparado por
las siete luces. Gradualmente, la Escuela de Misterios (las siete ramas consideradas como
unidad) dispensa el pan bendito de la razón humana. Hoy más que nunca los seres humanos
vuelven a buscar a sus dioses; o más bien diríamos que se apartan disgustados de nuestra
era de materialismo que, lenta, pero ciertamente, está destruyendo todo lo que en la vida es
belleza y espiritualidad. Nuestro materialismo está destruyendo las almas de los hombres;
está rompiendo el corazón del mundo; está ahogando la mejor parte de nuestras naturalezas,
y algo dentro del hombre se rebela contra esa opresión antinatural. Muchos que jamás
pensaron antes en esto comienzan a preguntarse cuál será el fin de todo esto, hasta dónde el
género humano podrá sumergirse en el materialismo sin que se derrumbe la estructura ética
que sostiene nuestra era moderna.
En los últimos cincuenta años, se multiplicaron de a miles los peregrinos
espirituales que han emprendido la búsqueda de la verdad, peregrinando por los valles y las
colinas del alma humana, buscando la respuesta al enigma del destino. Tratan de encontrar
a aquellos Maestros de Sabiduría de que habla la leyenda pero que no registra la historia, en
toda esta búsqueda hay una gran incertidumbre, pero hay uno o dos hechos que resultan
perfectamente claros. El primero: la mayoría de la gente ignora qué es lo que busca. Si
encontrase, la verdad, no la reconocería. Los Maestros que buscan esa gente alternan con
ellos todos los días; pero, al igual que Sir Launfal, las gentes se van a lejanas tierras, en
procura de las cosas que hallarían en los umbrales de sus propias puertas. El segundo: si
encontrasen la sabiduría, no la aceptarían. Todos ellos se sentirían contentos de tener el
poder de los Maestros, pero pocos de ellos trabajarían desinteresadamente con una
dedicación y un esfuerzo a toda prueba, por muchas edades, para obtener ese poder y
consagrarlo sin reservas al bien de la humanidad.
Antes de pasar a nuestro próximo tema, hagamos un resumen de algunos puntos que
deben ser recordados en lo concerniente a la Gran Obra y a sus “obreros” en el mundo.

1.- El instinto de la reverencia a lo desconocido es propio de toda vida humana.
Parecería que ese instinto es propio también de varias especies de animales superiores, pues
al vérselos echados a los pies de sus dueños dijérase que las almas de esos animales llenos
de amor y ternura, hablan a través de los ojos levantados hacia el amo. El cariño del perro a
su amo y el cariño del discípulo a su maestro van muy unidos. El perro sólo anhela que su
amo le diga palabras cariñosas y daría su vida por éste. Esa es devoción verdadera. Desde
El salvaje para arriba, la reverencia y la devoción a los dioses forma parte del código moral
de la humanidad. Los seres humanos podrán negar esto, pero esto persiste ya bajo forma de
fe, ya de temor, ya de superstición.
2.- El Hacedor de ese gran plan que llamamos vida, el ser del cual hemos sido
diferenciados, confirió al hombre ciertas potencias que, despiertas en poderes dinámicos,
dará a cada cual la facultad a través de la cual podrá reconocer ese “plan”. Aprendiéndolo
por si mismo y aplicando su sabiduría, acaso alcance el hombre la posición de poder asistir
a otros en la armonización de sus vidas con la misma ley.
3.- A fin de difundir esta sabiduría en forma sabia, entre las naciones de la Tierra,
las Escuelas de los antiguos Misterios fueron establecidas, no por voluntad de los hombres,
sino por voluntad de los propios dioses, los cuales trabajan a través de “canales”
seleccionados de entre las criaturas más altamente evolucionadas de la Tierra.
4.- Habiendo establecido estas escuelas, las inteligencias superiores se constituyeron
en los poderes centrales invisibles de ellas, y todavía siguen en comunicación con los
Adeptos y Maestros que al presente rigen los destinos de estas órdenes secretas.
5.- Todo desarrollo espiritual tiene que ocurrir a través de uno de los siete canales
dispuestos por la naturaleza a tal fin; en cierta etapa de su desarrollo espiritual, cada
penetrará en el sendero planetario más adecuado para desenvolver las cualidades
latentes dentro de sí.
6.- Estas siete escuelas, y sus ramificaciones en todas las partes del mundo,
constituyen la Gran Logia Blanca. Esta es la institución divina establecida para conferir la
Sabiduría Antigua a nuestro planeta. Está compuesta de todos los iniciados y adeptos del
Sendero Blanco y forma el gobierno invisible de la Tierra.
7.- La Sabiduría Antigua contiene el conocimiento verdadero y seguro del plan por
el cual fueron creados y establecidos los dioses, el ser humano y universo, por el cual estos
se mantienen y por el cual se disolverán en un futuro en la eternidad. Es el conocimiento de
todas las cosas en sus relaciones con Dios, la Naturaleza y ellas mismas, y es la única guía
por la cual el ser humano puede ver la senda que debe seguir si quiere liberarse de la
ignorancia y oscuridad del materialismo.
8.- Cualquier persona puede recorrer ese sendero, siempre que acepte y acate las
obligaciones que la Sabiduría Antigua estatuye e impone a quien desee conocer los
misterios de la vida y de la muerte. Si el ser humano quiere vivir la vida que tal Sabiduría
indica, no sólo ha de conocer la doctrina que ella predica, sino que también ha de conocer a
los Grandes que fueron elegidos por sus propias virtudes para enseñar a sus hermanos
menores la sabiduría Antigua.

Manly Palmer Hall – Lo Que la Sabiduría Antigua Espera de Sus Discípulos

RESPIRACION PRANICA CON ENERGIA FOTONICA



Respiración Pránica Con Energía Fotónica
Kahu Fred Sterling
www.Kirael.com
Traducción: Anita Manasse
estrellam@sion. com
30 de mayo, 2008

La energía fotónica es un nuevo poder milagroso que es la cura para todas las enfermedades de nuestro viaje aquí en el plano Terrestre. Podemos usar al fotón para traer la fuerza del espíritu al frente de nuestro viaje, para lograr la paz interior que transforma.
A un nivel práctico, andando el tiempo vamos a hacer funcionar nuestros vehículos con fotones y vamos a curar las enfermedades más personales que limitan a nuestro viaje. Los fotones pueden hacer que un simple dolor de cabeza desaparezca, o que se relaje un calambre severo.
Para aquellos de ustedes que son escépticos, el escepticismo será dispersado en el momento en el que necesiten esta energía mágica, y recuerden de inspirarla dentro de su forma física.
¿Qué sería la peor cosa que podría suceder si se olvidan de esta simple práctica de respirar fotones? Quizás, como la mayoría de nosotros cuando sentimos dolores, ustedes simplemente se olvidaron de inspirarla, privando a su cuerpo de esta energía mágica, y en cambio toman una aspirina o dejan que la Madre Naturaleza se ocupe de su calambre.
Queda por sentado que sería mejor que regulen su cuerpo mediante la respiración pránica del fotón. De esa forma, el dolor de cabeza o el calambre desaparecerían de forma “mágica”. De hecho, si sienten que su vida se les va escapando, ustedes la pueden recuperar con toda la forma, mediante la respiración pránica. ¡Es su elección, su vida!

Simplemente pensando en voz alta.

Kahu Fred Sterling

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miércoles, 28 de octubre de 2009

HABITOS QUE DAÑAN EL CEREBRO - MATAN NEURONAS


HABITOS QUE DAÑAN EL CEREBRO - MATAN NEURONAS

1. No Desayunar

La gente que no desayuna tiene bajo nivel de azúcar en la sangre. Esto genera insuficiente suministro de nutrientes al cerebro causando su degeneración paulatina.
2.. Comer de más
Esto causa el endurecimiento de las arterias del cerebro, causando además baja capacidad mental.
3. Fumar
Causa la disminución del tamaño cerebral y promueve además Alzheimer.
4. Consumir altas cantidades de azúcar
El alto consume de azúcar interrumpe la absorción de proteínas y nutrientes causando malnutrición y puede interferir en el desarrollo del cerebro.
5. Contaminación del aire
El cerebro es el más grande consumidor de oxígeno del cuerpo. Inhalar aire contaminado disminuye su oxigenación generando una disminución de la eficiencia cerebral.
6. Dormir poco
El dormir permite al cerebro descansar. La falta de s ueño por periodos prolongados acelera la pérdida de células del cerebro.
7. Dormir con la cabeza cubierta
Dormir con la cabeza cubierta aumenta la concentración de dióxido de carbono y disminuye el oxígeno causando efectos adversos a nuestro cerebro.
8. Hacer trabajar al cerebro cuando estamos enfermos
Trabajar y estudiar cuando estás enfermo además de la dificultad del cerebro para responder en ese estado, lo daña.
9. Falta de estimulación
Pensar es la major manera de estimular nuestr o cerebro no hacerlo provoca que el cerebro disminuya su tamaño y por lo tanto su capacidad.
10. Practica la Conversación inteligente

Conversaciones profundas o intelectuales promueven la eficiencia cerebral

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Razones para Dormir y Despertar temprano

De las 9 - 11pm: Es el horario en el que cuerpo realiza actividades de eliminación, químicos innecesarios y tóxicos (desintoxicación) mediante el sistema linfático de nuestro cuerpo. Este horario del día debe utilizarse en encontrar un estado de relajación, escuchando música, por ejemplo.
Generalmente a esta hora las mamás realizan actividades tales como limpiar la cocina, monitorear que todo esté listo para la actividad del día siguiente, etc. actividades que generan un estado de falta de relajación lo que genera un efecto negativo para la salud.
De las 11pm - 1am: el cuerpo realiza el proceso de desintoxicación del hígado, e idealmente debe ser procesado en un estado de sueño profundo.
Durante las primeras horas de la mañana 1 - 3am: proceso de desintoxicación de la vesícula biliar, idealmente debe suceder también en un estado de sueño profundo.
Temprano en la mañana 3 - 5am: desintoxicación de los pulmones. Es por esto que en ocasiones en este horario se producen accesos sev eros de tos. Cuando el proceso de desintoxicación ha alcanzado el tracto respiratorio es mejor no tomar medicamentos para la tos ya que interfieren en el proceso de eliminación de toxinas.
Mañana 5 - 7am: desintoxicación del colon, es el horario de ir al baño a vaciar el intestino.
Durante la Mañana de 7 - 9am: absorción de nutrientes en el intestino delgado, Es el horario perfecto para tomar el desayuno. Si estás enfermo el desayuno debe tomarlo más temprano: antes de las 6:30am.
El desayuno antes de las 7:30am es benéfico para aquellos que quieren mantenerse en forma.
Quienes siempre se saltan el desayuno, deben procurar cambiar el hábito, siendo lo menos dañino realizarlo entre las 9:00 y 10:00 am en lugar de no hacerlo por completo.
Dormirse tarde y despertar tarde interrumpirá el proceso de desintoxicación de químicos innecesarios de tu organismo.
Además de eso debes tener en cuenta que de las 12:00 a las 4:00am es el horario en el que la médula ósea de tus huesos produce la sangre, así es que procura dormir bien y no te duermas tarde.

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Los alimentos "Top-five" causantes de cáncer:

1. Hot dogs. Porque son altos en nitratos. La "Cancer Prevention Coalition" advierte que los niños no deben comer más de 12 salchichas al mes. Si no puedes vivir sin las salchichas compra de las que son hechas SIN nitrato de sodio.
2. Carnes procesadas y tocino
También contiene altos niveles de nitrato de sodio de las salchichas, contenido también en el tocino y otras carnes procesadas que además incrementan el riesgo de enfermedades del corazón. La grasa saturada en el tocino también es un gran c olaborador en la generación de cáncer.
3. Donas.. Las Donas son doblemente causantes de cáncer . Primero porque son elaboradas con flúor, azúcar refinada y aceite hidrogenado, después son FRITAS a altas temperaturas. Las donas son el primer "alimento" de todos los que puedas comer que elevarán altamente tu riesgo de generar cáncer.
4. Papas fritas. Así como las donas, las papas fritas son elaboradas con aceites hidrogenados y cocinadas después a altas temperaturas. También contienen acryl amidas que se generar durante el proceso de cocción a altas temperaturas. Deberían llamarse papas cáncer en lugar de papas a la fritas.
5. Botanas y galletas. Todas estas son usualmente elaboradas con fluor y azúcar. Hasta las que en sus etiquetas son orgullosamente presentadas como libres de grasas transgénicas genera lmente los contienen solo que en cantidades menores.

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Causas principales que dañan el hígado

1. Dormirse tarde y despertarse tarde
2. No orinar por la mañana
3. Comer demasiado
4. Saltarse el desayuno
5. Consumir muchos medicamentos
6. Consumir conservadores, colorantes, endulzantes artificiales
7.. Consumir aceites de cocina no saludables. Tanto como puedas reduce el consumo de alimentos20fritos aún cuando utilices aceites sanos. No consumas alimentos fritos cuando estes cansado o enfermo a menos que seas muy delgado, pero si puedes evítalo.
8. Consumir alimentos crudos o demasiado cocidos le agregan carga al hígado.
Los vegetales deben ser comidos crudos o poco cocidos, Si consumes vegetales fritos debes hacerlo en una sola sentada, es decir no debes guardarlos para consumo posterior.
Debemos seguir estos consejos sin que signifique mayor gasto. Solo tenemos que adoptar un estilo de vida más sano y mejorar nuestros hábitos alimenticios.. El mantener buenos hábitos de alimentación y ejercicio es muy positivo para que nuestro organismo absorba lo que necesita y elimine los químicos en su "horario".

TOMA EN SERIO TU SALUD..................
Y COMPARTE ESTA INFORMACIÓN CON TODOS LOS QUE AMAS .....

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El ser interior es tu destino...

cuando hayas llegado a tu ser interno,
ya no habrá mas fríos y desolados inviernos,
porque el sol iluminará tu rostro,
como si en tu alma vivieras eternamente ,
una risueña primavera,
que como espejo reflejara ,
el oro más esplendoroso,
el multicolor prisma más brillante,
y puros serán tus sentimientos ,
como aguas frescas y cristalinas,
respirarás la energía del amor,
por todos tus poros y arterias,
lo que te llenará de salud y alegrías,
superado todo abismo y pozo,
tu corazón estará lleno de gozo,
habrás alcanzado tu Paz bendita...

Angel yofiel

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LA COMPRENSION
KRISHNAMURTI


La comprensión viene en relámpagos, y debe haber intervalos de silencio para que los relámpagos se produzcan; pero el ágil es demasiado impaciente para dejar lugar a estos relámpagos. La comprensión no es verbal, y no existe comprensión intelectual. La comprensión intelectual sólo ocurre en el nivel verbal, y por consiguiente no es comprensión en absoluto. La comprensión no llega como un resultado del pensamiento, pues el pensamiento después de todo es verbal. No hay pensamiento sin memoria, y la memoria es la palabra, el símbolo, el proceso de hacer imágenes. En este nivel no hay comprensión. La comprensión viene en el espacio entre dos palabras, en este intervalo que existe antes que la palabra moldee el pensamiento. La comprensión no es para el perspicaz ni para el lerdo, sino para los que se dan cuenta de este inmensurable espacio.

KRISHNAMURTI

martes, 27 de octubre de 2009

LOS 144 DANZANTES DEL SOL - PORFECIA DE LOS INDIOS HOPIS


PROFECIA DE LOS INDIOS HOPI ( 1920 )
LOS 144 DANZANTES DEL SOL ( LOS 144.000 MAESTROS DEL NUEVO TIEMPO REAL )
CABALLEROS DE LA ORDEN DEL SOL
VICTOR SALAZAR SOTO

El Gran Abuelo habla como portavoz del Gran Espíritu Guerrero , de las Visiones que recibió a la entrada de la Gran Caverna Eterna:

No basta con que el hombre sea feliz en su carne , sino que debe ser feliz en su espíritu . Porque sin felicidad y fuerza espiritual la vida es engañosa. Sin buscar las cosas del espíritu, la vida se vive a medias y está vacía. Por vida espiritual no quiero decir el apartarse una hora de un día para estar en adoración, sino buscar las cosas del espíritu cada hora de cada día. Les pregunto: Qué hizo esta gente para encontrar iluminación y fuerza espiritual? Sólo se dedicaron a una vida que tenía poco mas que trabajar? Se les dio la oportunidad cada día de sus vidas – tal como a Uds. les será dada la elección de buscar la fuerza del espíritu o resignarse a una vida de trabajo sin significado. El resultado es siempre el mismo: sepulcros olvidados y sueños olvidados, de olvidadas gentes. No es importante lo que alguien recuerde, sino alcanzar a Dios y sostener una posición positiva del Espíritu Que Mueve Todas Las Cosas, trayendo la conciencia del hombre mas cerca del Creador.
No basta con buscar las cosas del espíritu a un nivel personal. Es egoísta hacerlo así, y quienes buscan lo espiritual sólo para si mismos no están buscando cambiar al espíritu que se mueve a través de los corazones de los hombres. Ellos están escapando, eludiendo su responsabilidad, y usando su conocimiento para su propia glorificación. Un hombre espiritual debe trabajar por un principio, por una causa, por una búsqueda mucho mayor que la glorificación de si mismo, para cambiar el espíritu que dirige a los hombres hacia su destrucción.
Intentar vivir una vida espiritual en la sociedad moderna es el camino mas difícil que se puede recorrer. Es un camino de dolor, aislación y pruebas de fe. Pero es el único camino que puede hacer nuestra Visión una realidad. La verdadera búsqueda en la vida, es vivir la Sabiduría de la Tierra dentro de los confines del hombre. No hay iglesia ni templo que necesitemos para encontrar la paz, porque nuestros templos están en la naturaleza. No hay líderes espirituales, porque nuestros corazones y el Creador son nuestros únicos líderes. Nuestro número es reducido, porque pocos hablan nuestro lenguaje o comprenden las cosas que vivimos. Así, recorrimos solos nuestros caminos, porque cada Visión, cada búsqueda, es única para cada individuo. Pero debemos caminar en la sociedad, o nuestra Visión morirá. Porque un hombre que no vive su Visión, está viviendo su muerte.
La Tierra está muriendo. La destrucción del hombre está cerca, tan cerca, que todos debemos trabajar para cambiar el camino de destrucción. Debemos pagar por los pecados de nuestros abuelos y abuelas, porque por mucho tiempo hemos sido una sociedad que mata a sus nietos para alimentar a nuestros hijos No puede haber descanso, ni podemos renunciar. Demasiados han renunciado en el pasado. Es fácil vivir una vida espiritual lejos del hombre, pero la realidad de la Visión sólo puede ser vivida cuando se participa en la sociedad.
He tenido la Visión de la destrucción del hombre. Pero al hombre le serán dados cuatro signos de advertencia, dos de ellos para darle la oportunidad de cambiar, y dos de ellos para dar a los Hijos de la Tierra la oportunidad de escapar de la ira del Creador. Los signos serán obvios para ti y para quienes han aprendido a escuchar al Espíritu de la Tierra. Pero aquellos quienes viven en la carne y sólo para la carne, no habrá conocimiento ni comprensión. Cuando estos signos, advertencias y profecías se hagan manifiestos, entenderás la urgencia de lo que digo. Entonces entenderás porqué uno no debe trabajar sólo por su fuerza espiritual, sino para dar acceso a la fuerza espiritual al hombre moderno.

EL PRIMER SIGNO
Siguiendo al Gran Espíritu Guerrero, entré en un mundo desconocido. Estaba en un mundo seco, con poca vegetación. A la distancia vi un poblado, construido con carpas y telas, en lugar de los materiales normalmente usados por el hombre. Cuando nos acercamos, el olor de la muerte me afectó y me sentí enfermo. Escuché el llanto de niños, las quejas de los mayores, y sonidos de dolor y desesperación. Pilas de cuerpos se amontonan al costado de trincheras, esperando ser sepultados, con sus rostros contorsionados y deformados por la muerte de inanición. Los cuerpos eran mas esqueletos que carne, y los niños, adultos y mayores tenían el mismo aspecto, con su piel originalmente morena ahora de un color gris ceniza. Cuando entré en el poblado, el horror de las muertes por hambre me golpeó mas fuerte. Los niños apenas caminan, los mayores yacen moribundos sobre el suelo, y hay dolor, llanto y miedo por todas partes. La presencia de la muerte y la sensación de desesperanza me sobrecogió, amenazando con llevarme lejos del poblado.
Un adulto me habló, en un lenguaje desconocido. Comprendí que no era un hombre de carne y hueso, sino el espíritu de un hombre que un día transitó por un camino espiritual, posiblemente el shaman de su tribu. Entonces comprendí lo que trataba de decirme con lentas palabras: “Bienvenido a lo que llamamos la tierra del hambre. El mundo un día mirará esto con horror. Este será el primer signo de que el hombre no puede vivir prescindiendo de las leyes del Creador, ni puede luchar contra la Naturaleza. Si el hombre comprende que tiene la culpa de esta calamidad, por esta hambre sin sentido, habrá aprendido una gran lección. Pero temo que el hombre no asumirá su culpa, sino que culpará a la Naturaleza. No comprenderá que él creó este lugar de muerte al forzar a las gentes a tener muchos hijos. Cuando las leyes de la tierra fueron violadas, la gente murió de hambre, tal como la naturaleza mata de hambre al venado cada vez que su población crece demasiado para que la tierra lo sostenga. Esta gente debió haber sido dejada sola. Una vez supieron como vivir con la Tierra, y su riqueza se medía en felicidad, amor y paz. Pero esto les fue despojado cuando fueron considerados como una sociedad primitiva. Entonces el mundo les mostró como cultivar y vivir de un modo menos primitivo. Fue el mundo que les forzó a vivir fuera de las leyes de la Creación y, como resultado, ahora les fuerza a morir “Luego el viejo se alejó, de regreso a la muerte y la desesperación. Se volvió hacia el Gran Abuelo por última vez, diciendo: “Este será el primer signo. Primero vendrá el hambre, y después hambre. Nada capturará la atención del mundo con tal impacto como lo hará este signo. Los Hijos de la Tierra aprenderán las lecciones contenidas en todo este dolor y muerte, pero el mundo lo tomará como una calamidad mas, culpando a la Naturaleza en lugar de a si mismo”.
Al desaparecer el anciano, el Gran Abuelo se encontró de regreso a la entrada de la Caverna Eterna. El Gran Abuelo cayó en un profundo sueño, y en su sueño el Gran Espíritu Guerrero habló de nuevo al Gran Abuelo: “Es durante los años de calamidad, el primer signo, que una enfermedad caerá sobre el hombre, una enfermedad que barrerá la tierra y aterrorizará a las masas. Los médicos no tendrán respuestas, y un gran grito de dolor se esparcirá sobre la tierra. La enfermedad provendrá de los monos, las drogas y el sexo. Destruirá al hombre desde adentro, haciendo que cualquier enfermedad común sea una enfermedad mortal. El hombre se buscará esta enfermedad como resultado de su vida, su adoración por el sexo y las drogas, y su vida alejada de la Naturaleza. Esto también es parte del primer signo de advertencia. Las drogas producirán guerras en las ciudades del hombre, y las naciones se levantarán contra esas guerras y contra esa enfermedad mortal. Pero lucharán de manera equivocada, atacando el efecto el lugar de la causa. Nunca ganará esta guerra hasta que la nación, la sociedad, cambie sus valores, y abandone la adoración del sexo y las drogas. Es en este momento que el hombre tiene la oportunidad de cambiar el curso del futuro. Es entonces que puede aprender la gran lección de la calamidad y la enfermedad. Pero hasta que aparezca el segundo signo, la Tierra no puede ser curada en lo material. Sólo una curación espiritual puede cambiar el futuro de la humanidad ”.


EL SEGUNDO SIGNO
El Gran Abuelo despertó nuevamente a la entrada de la Caverna. Al mirar a su alrededor toda había cambiado. Los campos se veían mas secos, sin vegetación y los animales están moribundos. Un mortal hedor se levanta de la tierra y el polvo es grueso y pesado, el calor intenso y opresivo. Al mirar al cielo, el Sol aparece mas grande y mas intenso. No se ven pájaros ni nubes, y el aire parece ser mas grueso. Entonces que el cielo se agita y aparecen grandes agujeros en el cielo. Los agujeros se abren con gran estruendo, que resuena como el trueno, y la tierra, las rocas y el suelo se estremecen.
La piel del cielo parece abrirse en heridas, como las heridas de una peste, un gran mar flotante de pestilencia, aceite y peces muertos. Fue a través de uno de estos agujeros que el Gran Abuelo vio los cuerpos de delfines muertos, junto con grandes levantamientos de la Tierra y violentas tormentas. Al sostenerse del temblor de tierra, sus ojos bajaron del cielo, y todo en su alrededor era un desastre. Montones de desechos se elevan hasta el cielo, los bosques yacen arrancados y moribundos, las costas inundadas y las tormentas crecen mas violentas y estruendosas. A cada momento, la Tierra se sacude mas fuertemente, amenazando con partirse y tragar al Gran Abuelo.
De pronto la Tierra deja de temblar y el cielo se despeja. El Gran Espíritu Guerrero aparece caminando entre el aire polvoriento y se detiene a corta distancia del Gran Abuelo. Al contemplar su rostro, el gran Abuelo ve que lágrimas caen de los ojos del Gran Espíritu Guerrero, y que cada lágrima cae sobre la tierra con un sonido cristalino. El Gran Espíritu contempla al Gran Abuelo por largo tiempo, y finalmente dice: “Agujeros en el cielo”. El Gran Abuelo piensa, de manera incrédula “ Agujeros en el cielo ...? “ . Y el Gran Espíritu responde: “Estos serán el segundo signo de destrucción del hombre. Los agujeros en el cielo y todo lo que has visto podrán ser realidad. Es a partir de este momento que el hombre ya no podrá curar a la Tierra por ninguna acción física. Es entonces que el hombre deberá trabajar mas duro para cambiar el futuro. Pero no sólo debe trabajar materialmente, sino espiritualmente a través de la invocación, pues sólo por la invocación puede el hombre curar la Tierra y a si mismo”.
El Gran Abuelo vacila en creer en los agujeros en el cielo. Hay una larga pausa. Entonces el Gran Espíritu se le acerca susurrando: “Estos agujeros son el directo resultado de la vida del hombre, sus viajes, y los pecados de sus abuelos y abuelas, y serán el legado de sus vidas alejadas de la Naturaleza. El signo de estos agujeros marca el momento de una gran transición en el pensamiento de la humanidad. Quedarán entonces librados a una elección, elección entre continuar su sendero de destrucción o regresar a la sabiduría de la Tierra y una existencia mas sencilla. Es entonces cuando se debe elegir, o todo estará perdido”. Entonces el Espíritu se volvió y desapareció caminando entre el polvo.

EL TERCER SIGNO
En los días siguientes el Gran Abuelo pasó a la entrada de la Caverna, para nada le habló, ni siquiera la Tierra. El Gran Abuelo dice que fueron días de gran tristeza y soledad, días para digerir lo que había visto. Supo que estos signos no aparecerían durante su vida, pero que debían ser transmitidos a la gente del futuro con la misma fuerza y sentido de urgencia que le habían sido dados. Pero no sabía como hacerlo. Seguramente los chamanes y ancianos comprenderían, pero no así la sociedad, y menos alguien que esté alejado de la Tierra y el Espíritu.
Estuvo sentado por cuatro días, inmóvil como hecho de piedra, con su corazón pesado por la pesada carga que había contraído. Al final del cuarto día, llegó la tercera Visión. Contemplando los campos hacia la puesta del Sol, de pronto el cielo se tornó líquido y de color rojo sangre. Hasta donde sus ojos podían contemplar, el cielo era color rojo intenso, sin sombra ni nube ni variación alguna ni textura diferente. Toda la Creación parecía haberse detenido, como en espera de una orden superior. El tiempo, al lugar, el destino, parecen suspendidos en el cielo de sangre. Contempló largo tiempo el cielo, presa de la angustia y el terror, porque nada era como lo que había visto en toda su vida, ni en la salida ni en la puesta del Sol. Era un color humano, no natural, y tenía un aspecto siniestro y acechante. Parecía quemar la Tierra dondequiera que la tocara. Cuando se hizo la noche, las estrellas brillaron en rojo vivo, rojo que nunca abandonaba al cielo, y se escuchaban gritos de miedo y de dolor por todas partes.
Nuevamente el Gran Espíritu Guerrero se presentó al Gran Abuelo, pero ahora como una voz en los cielos. Como un trueno, la voz estremeció los campos: “Este es el tercer signo, la noche de las estrellas de sangre. Será conocido en todo el mundo, porque el cielo en todas partes será rojo con la sangre de los cielos, día y noche. Es entonces, con el tercer signo, que ya no habrá esperanza. La vida sobre la Tierra, como la ha vivido el hombre, llegará a su fin, y no habrá retorno ni el lo material ni en lo espiritual. Será entonces que, si el hombre no ha cambiado en los signos anteriores que el hombre sabrá que ha llegado la destrucción de la Tierra. Porque cuando el cielo sangre fuego, no habrá refugio en el mundo del hombre ”. El Gran Abuelo tembló de terror mientras la voz hablaba: “A partir de este momento, desde que las estrellas sangren, hasta la aparición del cuarto signo, habrá cuatro estaciones de tranquilidad. Durante estas cuatro estaciones los Hijos de la Tierra deben internarse en las profundidades de lugares remotos y encontrar una nueva residencia, cerca de la Tierra y del Creador. Sólo los Hijos de la Tierra sobrevivirán, y deberán vivir la sabiduría de la Tierra, sin nunca regresar a los pensamientos del hombre. Y la supervivencia no será suficiente, porque los Hijos de la Tierra deberán vivir cerca del Espíritu. Diles que no vacilen, cuando vean el tercer signo en las estrellas, porque sólo habrá cuatro estaciones para escapar ”. El Gran Abuelo sostuvo esta Visión por una semana , y luego desapareció tan rápido como le llegó.

EL CUARTO SIGNO
El Gran Abuelo no supo cuanto tiempo pasó a la entrada de la Gran Caverna, ni le importaba, porque había obtenido la Visión por la que había venido. Fue en su última noche que vino su cuarta Visión, esta vez en la forma de la voz de un pequeño niño: “El signo cuarto y final se verá en los diez inviernos siguientes, después de que las estrellas sangren. Durante este tiempo la Tierra se curará así misma, y los hombres morirán. Por estos diez años, los Hijos de la Tierra deberán permanecer escondidos en lugares remotos, sin un lugar de residencia permanente, evitando todo contacto con las fuerzas del hombre. Deberán permanecer escondidos, como los antiguos nómades, y luchar contra la necesidad de retomar el contacto la destrucción de los hombres. La curiosidad matará a muchos ”.
Hubo un largo silencio. El Gran Abuelo preguntó al niño: “ Y que ocurrirá al mundo del hombre ? ... “ . Otro prolongado silencio. El niño de nuevo habló: “Habrá gran calamidad en todo el mundo, como no es posible imaginar. Las aguas correrán sucias, envenenadas con los pecados de los hombres regando los suelos, lagos y ríos. Las cosechas se perderán, los animales del hombre morirán, y la enfermedad matará a las masas. Los nietos se alimentarán de los despojos de los muertos, y todo será gritos de dolor y angustia. Pandillas de hombres cazarán y matarán a otros hombre por alimento, y el agua siempre será escasa, y mas escasa por cada año que pasa. Las tierras, el agua, el cielo, estarán envenenados, y el hombre vivirá en la cólera del Creador. Al principio el hombre se refugiará en las ciudades, pero allí morirán. Unos pocos escaparán a lugares remotos, pero la naturaleza salvaje los destruirá, porque hace mucho tiempo les fue dada la oportunidad. El hombre será destruido, sus ciudades en ruinas, y entonces sus nietos deberán pagar por los pecados de sus abuelos y abuelas ”.
“ No hay ninguna esperanzas ? ... “preguntó el Abuelo Apache. El niño replicó: “Sólo hay esperanza cuando se vean los primeros dos signos. En el tercer signo, la noche sangrienta, ya no hay esperanza, porque sólo los Hijos de la Tierra podrán sobrevivir. Se dará al hombre estos signos de advertencia. Si no se les presta atención, no podrá haber esperanza, porque sólo los Hijos de la Tierra serán purgados de los cánceres de la humanidad, del pensamiento destructivo de la humanidad. Serán los Hijos de la Tierra quienes traerán la nueva esperanza de una nueva sociedad, viviendo más cerca de la Tierra y del Espíritu”.
Luego se hizo el silencio. El paisaje se despejó y todo volvió a ser normal, y el Gran Abuelo salió de su Visión. Estremecido, dijo que había vagado durante toda la nueva estación , tratando de comprender lo que había recibido, tratando de entender porqué él había sido elegido para recibir el mensaje.

lunes, 26 de octubre de 2009

MENSAJE DE FISICA CUANTICA


Mensaje de la Física Cuántica
El miércoles, 21 de octubre de 2009 a las 21:26
Esto no tiene que ver con religión sino con física cuántica.

Está demostrado por científicos de varias nacionalidades y países que 'tanto todo lo bueno como lo malo que existe en el mundo es producto de nuestra mente'. En un experimento que se realizó en una ciudad norteamericana se demostró que el poder de la mente, a través del pensamiento de 4.000 personas que se juntaron para pensar en positivo, logró disminuir el porcentaje de criminalidad en 35% en ese verano.
También se sabe que la Madre Teresa de Calcuta fue invitada en varias ocasiones a marchar en manifestaciones en contra de la guerra y ella contestó
- Yo no marcho allí. Invítenme a marchar a favor de la paz y yo iré, pero no me nombren esa palabra.
Es decir, cada vez que manifestamos algo con nuestro pensamiento y/o con nuestras palabras estamos dándole poder - para bien ó para mal- a ese movimiento ó persona.
Mientras más nos enfrasquemos en pensar acerca de la inseguridad y los innombrables, más poder le damos a ellos.
Espera, no se trata de ignorarlos, ni de aislarte de la realidad.
Se trata de mantener tu mente y tus deseos diciendo: - quiero la paz y la tranquilidad en mi país...
Solamente eso.
No despotriques , ni te la pases envenenándote con las noticias, solo dí:
- Quiero la paz y la tranquilidad en mi país...
Haz como la Madre Teresa: no le des poder a los oscuros, dale poder a tus pensamientos de luz para que se conviertan en realidad.
Si no lo crees no importa, igual te invitamos a pensar tantas veces como quieras, en el día y en la noche: 'quiero la paz y la tranquilidad en mi país'
Sólo con eso te harás y nos haremos el mayor de los favores.
Todo el tiempo que utilizas en pensar y criticar a los otros ahora utilízalo a tu favor: piensa en la paz.
Sí, ya se, dirás: pero si ellos hacen lo mismo se quedarán para siempre.
No, eso no sucederá porque nada puede más que el Poder de la Luz.
La oscuridad está fracasada ante el Poder de la Luz.
Piensa en este ejemplo: es muy, muy fácil alumbrar (con una vela, un yesquero, una linterna etc.) cualquier lugar por oscuro que sea...
Te invito a hacer una pequeña prueba, (no pierdes NADA y ganaremos muchísimo).
Todos los días antes de acostarte, cualquiera que sea la hora, imagina en tu pensamiento que te estás felicitando a ti mismo(a), a tus amigos y familiares porque todo esta mejor en nuestro pais.
Solo mírate por dos minutos ó más muy alegre porque cada dia surgen actividades para nuestro bien.
Nada, no digas nada, no digas la forma en que sucedió... déjale eso al Universo. Él todo lo arregla si tú se lo permites. Solo imagínate a ti mismo(a) pensando que todo sale perfectamente bien.
Que estás lleno(a) de alegría porque todo volverá a la normalidad, a la paz.
EL PODER DE NUESTRO PENSAMIENTO UNIDO ES MAS FUERTE QUE NINGÚN PENSAMIENTO OSCURO.
Si a la LUZ!
(Susana Grossi)

domingo, 25 de octubre de 2009

PROGRAMA ,LOS DEVELADOS - Reptilianos y vida intraterrena - Farah Yurduzu









Las Piedras de Ica - Jimenez Del Oso

Las piedras de ocucaje (Ica - Peru ) al sur de Lima
Documental, que trata de unas extrañas piedras con incisiones representando la coexistencia de los hombre con los dinosaurios, encontrada y explicada por un tal Dr. Cabrera en la cuidad de Ica.




CABALLEROS DE LA ORDEN DEL SOL
VICTOR SALAZAR

viernes, 23 de octubre de 2009

A LOS PIES DEL MAESTRO - KRISHNAMURTI



ESTE TEMA ES UN DE LAS MÁXIMAS DEL SR. KRISHNAMURTI DONDE EL TEMA CENTRA ES EL DISCERNIR DE LAS COSAS Y QUE TODO TIENE SU MOMENTO EN LA VIDA
A LOS PIES DEL MAESTRO - VICTOR SALAZAR SOTO
Por Krishnamurti
J. Krishnamurti y la Dra. Annie Besant
Digitalizado por Biblioteca Upasika 2003
www.upasika.tk
A LOS QUE LLAMAN
Conducidme desde lo ilusorio a lo Real.
Conducidme de las tinieblas a la Luz.
Conducidme de la muerte a la Inmortalidad.
PRÓLOGO
Estas palabras no son mías: son del Maestro que me enseñó. Sin Él no hubiera podido
hacer nada, pero con Su ayuda he puesto los pies en el Sendero. Vosotros también
deseáis penetrar en este Sendero; y así, las mismas palabras que Él me dijo os
ayudarán si queréis obedecerlas. No basta decir que estas palabras son bellas y
verdaderas; quien desee lograr éxito debe hacer exactamente lo que ellas entrañan.
Mirar la comida y decir que es sabrosa no satisfaría a un hambriento: ha de comerla.
Así pues, no basta escuchar al Maestro: debéis practicar lo que Él aconseja,
atendiendo a cada palabra y fijándoos en cada insinuación. Si no advertís una
indicación, si no atendéis a una palabra, queda perdida para siempre, porque Él no las
repite.
En este Sendero se requieren cuatro cualidades:
DISCERNIMIENTO
CARENCIA DE DESEOS
BUENA CONDUCTA
AMOR
Trataré de explicaros lo que el Maestro me dijo acerca de cada una de ella

A LOS PIES DEL MAESTRO
I
La primera cualidad es el DISCERNIMIENTO. Se denomina así, generalmente, a la
facultad de distinguir entre lo real y lo ilusorio, y la cual guía a los hombres para entrar
en el Sendero. Pero también es mucho más que esto, y debe practicarse no tan sólo en
los comienzos del Sendero, sino en cada una de sus etapas, diariamente, hasta el fin.
Vosotros entráis en el Sendero porque habéis aprendido que tan sólo en él pueden
encontrarse las cosas dignas de ser alcanzadas. Los que no saben esto trabajan para
adquirir riqueza y poder, pero esto dura a lo más una vida tan sólo y, por lo tanto, no es
real. Hay bienes mayores, reales y perdurables, cuando los hayáis alcanzado, ya no
desearéis jamás aquellos otros.
En el mundo hay dos clases de seres: los sabios y los ignorantes. Esta sabiduría es la
que nos interesa. La religión que un hombre profese, la raza a que pertenezca,
importan poco; lo realmente importante es que los hombres conozcan el plan Divino.
Porque el plan de Dios es la evolución. Una vez que el hombre realmente lo reconoce,
no puede sino identificarse con sus designios y trabajar de acuerdo con él, porque es
tan glorioso como bello. Así, conociéndolo, permanece al lado de Dios, firme para el
bien y resistente contra el mal, trabajando para la evolución y no por egoísmo.
Si está al lado de Dios, está unido a nosotros, y no importa lo mínimo que se llame
hindú o buddhista, cristiano o mahometano, ni que sea indio o inglés, chino o ruso. Los
que están al lado de Dios saben por qué están aquí y cuál es su misión, y procuran
cumplirla; los demás no saben todavía lo que han de hacer, y así obran a menudo
erróneamente e intentan trazarse vías que imaginan placenteras sin comprender que
todos somos uno y que, por lo tanto, tan sólo lo que el Uno quiere puede ser
verdaderamente agradable para todos. Ellos van en pos de lo irreal, en vez de lo real.
Hasta que aprendan a distinguir entre los dos, no se colocarán al lado de Dios, y, para
aprenderlo, discernimiento es el primer paso.
Pero, aun después de efectuada la elección, debéis recordar que hay muchas
variedades de lo real y lo irreal, y por lo tanto debemos discernir también entre lo justo
y lo injusto, lo esencial y lo accesorio, lo útil y lo inútil, lo verdadero y lo falso, lo egoísta
y lo altruista.
Aquellos que, deseosos de seguir al Maestro, han resuelto servir a lo justo a toda
costa, no hallan dificultad en la elección entre lo justo y lo injusto. Pero el cuerpo es
distinto del hombre, y la voluntad del hombre no siempre coincide con el deseo del
cuerpo. Cuando vuestro cuerpo desee algo, deteneos a pensar si vosotros realmente lo
deseáis. Porque vosotros sois Dios, y queréis únicamente lo que Dios quiere; así,
debéis buscar profundamente en vosotros mismos para hallar el Dios interno y
escuchar Su voz, que es vuestra voz. No confundáis con vosotros mismos ni vuestro
cuerpo físico, ni vuestro cuerpo astral, ni vuestro cuerpo mental, porque cada uno de
ellos pretenderá ser el Yo, a fin de obtener lo que desea. Debéis conocerlos todos y
reconoceros por su dueño.
Cuando se ha de hacer un trabajo, el cuerpo físico quiere descansar, pasear, comer y
beber; y el ignorante se dice a sí mismo: "Yo quiero hacer estas cosas y debo
hacerlas." Pero el sabio dice: "Lo que en mí desea no soy yo, y puede esperar." A
menudo, cuando se presenta alguna oportunidad para ayudar a alguien, el cuerpo
incita a pensar: "¡Qué molestia me causa esto! Dejemos que otro lo haga." Pero el
hombre le replica a su cuerpo: "Tú no me estorbarás para practicar el bien."
El cuerpo es nuestro animal, el caballo en que cabalgamos. Por lo tanto, debéis tratarlo
y cuidarlo bien; no debéis fatigarlo; debéis alimentarlo tan sólo con comidas y bebidas
puras, y llevarlo escrupulosamente limpio de la más leve mancha. Porque sin un cuerpo
perfectamente limpio y sano no podríais llevar a cabo el arduo trabajo de preparación,
ni podríais soportar el esfuerzo incesante. Pero vosotros debéis gobernar
constantemente al cuerpo, nunca el cuerpo a vosotros.
El cuerpo astral tiene sus deseos a docenas; él os inclina a la cólera, a la injuria, a la
envidia, a la avaricia, a codiciar los bienes ajenos, a sumiros en la depresión. El cuerpo
astral quiere todas estas cosas y muchas más, no porque desee perjudicaros, sino
porque le gustan las vibraciones intensas, así como el cambio constante de ellas. Mas
vosotros no necesitáis estas cosas, y por esto debéis saber distinguir entre vuestros
deseos y los de vuestro cuerpo.
Nuestro cuerpo mental desea pensar orgullosamente que es algo separado de lo
demás; pensar dándose mucho valor a sí mismo y poco a los otros. Aun cuando lo
hayáis apartado de las cosas mundanas, persiste en especular sobre sí mismo, en
incitaros a pensar en vuestros propios progresos, en vez de pensar en la labor de los
Maestros y en ayudar a los demás. Cuando meditéis, tratará de haceros pensar en las
diferentes cosas que él desea, en vez de pensar en lo que vosotros queréis. Vosotros
no sois esta mente, sino que ella está a vuestro servicio, y así también en este caso es
necesario el discernimiento. Debéis vigilar constantemente, so pena de fracaso.
El Ocultismo no tiene compromiso entre lo justo y lo injusto. Debéis hacer a toda costa
lo justo; debéis dejar de hacer lo injusto, sin importaros lo que el ignorante piense o
diga. Debéis estudiar profundamente las leyes ocultas de la Naturaleza, y cuando las
conozcáis, ordenad vuestra vida de acuerdo con ella, empleando siempre la razón y el
sentido común.
Debéis saber distinguir lo importante de lo secundario. Firmes como una roca cuando
de lo justo y de lo injusto se trate, dad siempre la razón a los demás en cosas de poca
importancia. Porque debéis ser siempre amables y cariñosos, razonables y
condescendientes; habéis de conceder siempre a los demás la misma libertad que
necesitáis para vosotros mismos.
Tratad de ver lo que es más meritorio que hagáis, y recordad que no debéis juzgar las
cosas por su aparente grandeza. Es mucho más meritorio hacer una cosa mínima pero
útil a la labor del Maestro, que otra de mayor apariencia de las que el mundo llama
buenas.
Debéis distinguir no tan sólo entre lo útil y lo inútil, sino entre lo más útil y lo menos útil.
Alimentar a un pobre es bueno, útil y noble; pero alimentar su alma es todavía más
noble y más útil que alimentar su cuerpo. Cualquier rico puede alimentar el cuerpo de
un necesitado, pero tan sólo los sabios pueden alimentar su alma. Si sois sabios,
vuestro deber es ayudar a otros en el logro de la sabiduría.
No obstante, por sabios que seáis, tenéis mucho que aprender en este Sendero, y por
esto también en él es preciso el discernimiento. Debéis pensar cuidadosamente lo que
es mejor que aprendáis. Todo conocimiento es útil, y llegará un día en que lo alcancéis;
pero mientras tan sólo poseáis una parte, cuidad de que ésa sea la más útil.
Dios es tanto Sabiduría como Amor, y cuanta más sabiduría alcancéis, mejor podréis
manifestar a Dios. Estudiad, pues; mas, en primer lugar, estudiad lo que os ayude a
ayudar a los otros. Estudiad pacientemente, no porque los hombres os llamen sabios,
ni aun por tener la dicha de serlo, sino porque tan sólo el sabio puede ayudar
sabiamente. Por mucho que deseéis ayudar, si sois ignorantes, podréis hacer más mal
que bien.
Debéis saber distinguir lo falso de lo verdadero; debéis aprender a ser verídicos en
todas las circunstancias, en pensamiento, en palabra y en obra.
Primero en pensamiento; y esto no es fácil, porque en el mundo hay muchos
pensamientos falsos, muchas supersticiones tontas, y nadie que esté esclavizado por
ellas puede progresar. así pues, no debéis sostener una idea precisamente porque
otros la sostienen, ni porque se haya creído en ella durante siglos, ni porque esté
escrita en algún libro que los hombres tengan por sagrado. Debéis pensar acerca de
aquel asunto por vosotros mismos, y juzgar si es razonable. Recordad que la opinión
de un millar de hombres acerca de algún asunto que desconozcan no tiene ningún
valor. Los que piensan hollar el Sendero deben aprender a pensar por sí mismos,
porque la superstición es uno de los mayores males del mundo, una de las ligaduras de
que totalmente debéis desembarazaros.
En lo tocante a los demás, vuestros pensamientos deben ser verídicos; no debéis
pensar acerca de nadie lo que no sepáis. No supongáis que los demás están siempre
pensando en vosotros.
Si un hombre hace algo que parezca perjudicaros, o dice algo que creáis que se refiere
a vosotros, no penséis entonces: "Quiere ofenderme." Probablemente ni siquiera
piensa en vosotros, porque cada alma tiene sus propias tribulaciones y pensamientos,
que flotan principalmente alrededor de ella. Si un hombre os habla colérico, no penséis:
"Me odia, trata de herirme." Quizá otra persona o alguna otra cosa lo han contrariado, y
porque tropieza eventualmente con vosotros, descarga su cólera en vosotros. Él obra
imprudentemente, porque toda clase de cólera es prueba de insensatez; pero vosotros
no os debéis formar de él un juicio equivocado.
Cuando seáis discípulos del Maestro, podréis poner siempre a tono la pureza de
vuestros pensamientos comparándolos con los Suyos. Porque el discípulo es uno con
su Maestro, y debe procurar fundir su pensamiento con el Suyo y ver si coinciden. Si no
están a tono, su pensamiento no es recto, y debe variarlo inmediatamente, porque los
pensamientos del Maestro son perfectos, puesto que Él lo sabe todo. Los que todavía
no han sido aceptados por Él, no pueden hacerlo del todo; pero pueden ayudarse
mucho deteniéndose a pensar a menudo: "¿Qué pensaría el Maestro en estas
circunstancias?" "¿Qué haría o qué diría el Maestro acerca de esto?" Porque no debéis
nunca hacer, decir o pensar lo que no podáis imaginar al Maestro haciéndolo,
diciéndolo o pensándolo.
Aun al relatar habéis de ser verídicos, exactos y sin exageración.
Nunca atribuyáis intenciones a otro; tan sólo su Maestro conoce sus pensamientos, y él
puede estar obrando por razones de que no tenéis idea. Si oís que dicen algo en contra
de alguna persona, no lo repitáis; podría no ser verdad, y aun cuando lo fuese, es
caritativo callar. Pensad bien antes de hablar, no sea que incurráis en inexactitudes.
Sed verídicos en la acción; jamás pretendáis ser otro del que sois, porque toda
pretensión sirve de impedimento a la pura luz de verdad que debe brillar a través de
vosotros como la luz del sol brilla a través de un diáfano cristal.
Debéis distinguir entre el egoísmo y el desinterés; porque el egoísmo se presenta bajo
muchas formas, y cuando creáis que al fin lo habéis destruido en algunos de sus
aspectos, surge en otro tan fuerte como siempre. Pero gradualmente os irá animando
tan por completo el pensamiento de ayudar a los demás, que no habrá lugar ni tiempo
para pensar en vosotros mismos.
También debéis distinguir en otro sentido. Aprended a reconocer a Dios en todos los
seres y en todas las cosas, prescindiendo del mal que puedan presentar en la
superficie. Podéis ayudar a vuestros hermanos por medio de lo que tenéis de común
con ellos, esto es, la Vida Divina. Aprended a despertarla y a vivificarla en ellos, así los
salvaréis de lo falso.
II
Hay muchos individuos para quienes la cualidad "CARENCIA DE DESEOS" es
verdaderamente difícil, porque sienten que sus deseos son ellos mismos, y que si
desechan sus deseos peculiares, sus gustos y disgustos, dejará de existir su yo. Pero
esto les sucede tan sólo a quienes no han visto al Maestro. A la luz de su Santa
Presencia se extinguen todos los deseos, menos el de igualarse a Él. Sin embargo,
antes que gocéis, de la felicidad de encontraros frente a frente con Él, podréis alcanzar,
si queréis, la "Carencia de deseos".
El Discernimiento os ha mostrado ya que las cosas que los hombres más desean,
como la riqueza y el poder, no tienen valor alguno. Cuando esto no se dice tan sólo,
sino que se siente en verdad, cesa todo deseo de ellos.
Así pues, todo eso es sencillo; sólo se requiere que lo comprendáis. Pero hay algunos
que cesan de perseguir los bienes terrenales, con el fin de ganar el cielo o alcanzar la
liberación personal del renacimiento; no debéis caer en este error. Si habéis olvidado al
yo, no podéis pensar en la hora en que este yo sea libre o qué clase de cielo tendrá.
Recordad que todo deseo egoísta ata, por elevado que sea su objeto, y en tanto no os
hayáis librado de él no estaréis enteramente preparados para dedicaros a la labor del
Maestro.
Cuando desaparezcan todos los deseos que se refieren al yo, todavía puede existir el
deseo de ver los resultados de vuestra obra. Si ayudáis a alguien, querréis ver en
cuánto lo habéis ayudado; aun tal vez queréis que aquel a quien habéis ayudado,
también lo vea y os lo agradezca. Esto es t odavía deseo, y, además, falta de confianza.
Cuando hacéis todo el esfuerzo que podéis para ayudar, debe dar un resultado, tanto si
podéis verlo como si no; si reconocéis la manera de obrar de la Ley, sabéis que esto es
así. Por esto debéis obrar rectamente por amor a lo recto, no con esperanza de
recompensa; debéis trabajar por amor al trabajo, no por la esperanza de ver el
resultado; debéis entregaros al servicio del mundo, porque lo amáis y no podéis dejar
de entregaros a él.
No deseéis poderes psíquicos ; ya vendrán cuando el Maestro comprenda que debéis
tenerlos. Además, es esforzarse en adquirirlos trae consigo, muy a menudo, gran
perturbación; frecuentemente, a su poseedor le descarrían los falaces espíritus de la
naturaleza, o se envanece y cree que él no puede caer en error; y el tiempo y el
esfuerzo que emplea para alcanzar estos poderes podría emplearlos, de cualquier otro
modo, en trabajar para los demás. Los poderes vendrán en el curso del desarrollo;
deben venir; y si el Maestro ve que es útil que los tengáis antes, os enseñará a
desarrollarlos sin peligro. Hasta entonces, estaréis mejor sin ellos.
Además, debéis precaveros de ciertos pequeños deseos que son comunes en la vida
diaria. No deséis jamás brillar o parecer superior en ningún sentido; no habléis mucho.
Es mejor hablar poco; es mejor todavía callar, hasta que estéis seguros de que lo que
vais a decir es VERDADERO, BUENO y PUEDE AYUDAR A OTROS. Antes de hablar,
pensad cuidadosamente si lo que vais a decir posee estas tres cualidades; si no es así,
no lo digáis.
Lo mejor es acostumbrarse desde el primer momento a pensar cuidadosamente antes
de hablar, porque cuando alcancéis la Iniciación debéis fijaros en cada palabra, no sea
que digáis lo que no debe decirse. Mucha habladuría vulgar es insensata y vana;
cuando es chismosa, es maligna. Así, acostumbraos a escuchar, mejor que a hablar,
no expongáis opiniones, a menos que os las pidan directamente. En resumen; las
cualidades son: saber oír, querer y callar; y la última es la más ardua de todas .
Otro común deseo que debéis reprimir severamente es el de inmiscuiros en los asuntos
de los demás. Lo que otro haga o diga o crea, no es cosa vuestra, y debéis aprender a
dejarlo completamente solo. Él tiene perfecto derecho al pensamiento, palabra y acción
libres, mientras no se meta con otro. Así como vosotros reclamáis la libertad de hacer
lo más conveniente, debéis concederle la misma libertad, y cuando la usufructúa no
tenéis ningún derecho a ocuparos de él.
Si pensáis que obra equivocadamente, y podéis hallar oportunidad de decirle
privadamente y con la mayor delicadeza vuestra opinión, es posible que lo convenzáis;
pero hay muchos casos en que, aun de esta manera, la intervención sería impropia.
Nunca debéis hablar a una tercera persona acerca del asunto, porque ésta es una
acción muy baja.
Si veis un caso de crueldad contra un niño o un animal, vuestro deber es defenderlos.
Si estáis encargado de instruir a otra persona, es vuestro deber reprender
afectuosamente sus faltas. Excepto en semejantes cas os, ocupaos de vuestros propios
asuntos y ejercitad la virtud del silencio.
III
Las seis reglas de conducta que particularmente se requieren, las da el Maestro en
este orden:
1ª Dominio de la mente.
2ª Dominio de la acción.
3ª Tolerancia.
4ª Alegría.
5ª Aspiración única.
6ª Confianza.
Sé que algunas de estas cualidades se han denominado diferentemente, pero yo hago
uso de los nombres que el Maestro mismo les daba al explicármelas.
1ª dominio de la mente. — La cualidad "Carencia de deseos" nos demuestra que
debemos dominar el cuerpo astral; esta otra significa lo mismo con relación al cuerpo
mental. Ello implica dominio del temperamento, de suerte que no podáis sentir cólera o
impaciencia; dominio de la mente, de modo que podáis sosegar y tranquilizar el
pensamiento y, por medio de la mente, dominio del sistema nervioso, a fin de que se
excite lo menos posible.
Esto último es difícil, porque cuando os preparáis para entrar en el Sendero, no podéis
evitar que vuestro cuerpo se haga más sensitivo, y así los nervios son perturbados por
cualquier choque o sonido, y sienten agudamente cualquier presión; mas debéis hacer
lo posible por evitarlo.
Mente tranquila significa también valor para arrastrar sin temor las pruebas y
dificultades del Sendero; significa además firmeza para considerar serenamente cuanto
os acontezca en la vida cotidiana, y evitar el incesante tedio e inquietud que dimanen
de ciertos pormenores de la vida, en los que muchos malgastan la mayor parte del
tiempo. El Maestro enseña que a un hombre no le debe importar lo más mínimo cuanto
provenga del exterior: tristezas, disgustos, enfermedades, pérdidas; todo esto nada
debe significar para él, ni ha de permitir que perturbe la calma de su mente. Estas
cosas son resultado de pasadas acciones, y cuando sobrevengan, debéis soportarlas
con calma, recordando que todo mal es transitorio, y que vuestro deber es permanecer
siempre contentos y serenos. Aquello pertenece a vuestras vidas anteriores, no a ésta;
no podéis alterarlo, y, así es inútil preocuparos por ello. Pensad, mejor, lo que hacéis
ahora, lo cual determinará los acontecimientos de vuestra próxima vida, pues esto
podéis modificarlo.
No cedáis jamás a la tristeza ni a la depresión.
La depresión es un mal, porque contamina a otros y torna sus vidas más penosas, a lo
cual no tenéis derecho alguno. Por esta razón, si alguna vez os acometen, desechadlas
para siempre.
Aun en otro sentido debéis dominar vuestro pensamiento; no le permitáis errar a la
ventura. Fijad la atención en lo que estéis haciendo, sea lo que fuere, para que lo
hagáis con toda la perfección posible; no acostumbréis vuestra mente a la vagancia;
antes bien conservad buenos pensamientos siempre en su fondo, dispuestos a surgir
en el momento en que ella esté libre.
Emplead todos los días el poder de vuestro pensamiento en buenos propósitos;
convertíos en un poder que trabaje de acuerdo con la evolución. Pensad cada día en
alguno de quien sepáis que está triste, que sufre o que necesita ayuda, y enviadle
pensamientos de amor.
Apartad vuestra mente del orgullo, porque el orgullo es hijo de la ignorancia. El
ignorante cree ser grande, cree que ha hecho esta o aquella gran cosa; el sabio sabe
que tan sólo Dios es grande y que sólo Él es el hacedor de todas las cosas buenas y
perfectas.
2a dominio de la acción. — Si vuestra mente es tal como debe ser, se perturbará muy
poco con vuestra acción. Recordad que para ayudar a la Humanidad, el pensamiento
debe convertirse en acción.
En esta labor no caben tibiezas, sino una constante actividad. Pero debéis cumplir
vuestro propio deber, no el de los demás, a no ser con su permiso y con el fin de
ayudarlos. Dejad que cada cual cumpla su propio deber, a su modo peculiar; estad
siempre dispuestos a ofrecer vuestro apoyo cuando sea necesario, pero nunca os
entrometáis. Porque, para algunas personas, la cosa más difícil del mundo es aprender
a cumplir sus propios deberes, y precisamente esto es lo que vosotros debéis hacer.
Aunque tratéis de realizar una labor más elevada, no por ello debéis olvidar vuestros
deberes ordinarios, pues hasta que éstos no queden satisfechos, no estaréis en
libertad para prestar otros servicios. No os comprometáis a nuevos deberes mundanos;
mas debéis cumplir perfectamente aquellos de que estéis encargados, esto es, todos
aquellos deberes que reconozcáis como evidentes y razonables, no deberes
imaginarios que otros traten de imponeros. Si queréis servirles a Ellos, debéis cumplir
vuestros deberes ordinarios mejor y no peor que los demás; porque haciendo esto
también Les servís.
3ª tolerancia.—Debéis sentir perfecta tolerancia hacia todos y un sincero interés por
las creencias de los que profesan otras religiones, tanto como por la que profesáis.
Porque la religión de los otros es un sendero que conduce a lo más elevado, lo mismo
que la vuestra. Para ayudar a todos, debéis comprenderlos.
Mas, para alcanzar esta perfecta tolerancia, debéis libraros antes del fanatismo y de la
superstición. Debéis saber que no hay ceremonias necesarias; de otro modo es
consideraríais algo mejores que los que no las practican. Sin embargo, no debéis
vituperar a los que aun las necesitan. Dejadles hacer su voluntad; pero ellos no deben
meterse con vosotros, que sabéis la verdad, ni deben tratar de imponeros aquello que
habéis trascendido. Sed indulgentes y bondadosos en todo.
Ahora que vuestros ojos están abiertos, quizás os parezcan absurdas algunas de
vuestras antiguas creencias y ceremonias; tal vez lo sean en realidad. Pero, aunque ya
no toméis parte en ellas, respetadlas por consideración a aquellas buen as almas para
quienes todavía tienen importancia. Ellas tienen su lugar y su utilidad, como la falsilla le
sirve a un niño para escribir derecho, hasta que aprende a escribir mejor y con mayor
igualdad sin ella. Hubo un tiempo en que las necesitasteis, pero ya pasó aquel tiempo.
Un gran instructor dijo: "Cuando yo era niño, hablaba, comprendía y pensaba como
niño; pero ya hombre, di de lado las niñerías."
Quien haya olvidado su infancia y perdido la simpatía por los niños no puede
enseñarles ni ayudarles. Así, sed bondadosos, amables, tolerantes con todos los
hombres sin distinción, sean buddhistas o indos, jainas o judíos, cristianos o
musulmanes.
4ª alegría.—Debéis sobrellevar alegremente vuestro karma, cualquiera que sea,
aceptando como un honor que el sufrimiento caiga sobre vosotros, porque esto
demuestra que los Señores del Karma os consideran dignos de ayuda. Por muy
penoso que resulte, agradeced que no sea peor. Recordad que podréis servir muy
poco para la labor del Maestro, mientras vuestro mal karma no se extinga y quedéis
libres. Al ofreceros a Él, habéis pedido que se acelerase vuestro karma, y así, en una o
dos vidas haréis lo que de otro modo hubierais debido hacer en cientos. Pero a fin de
obtener el mejor resultado, debéis sobrellevarlo alegremente.
Todavía hay otro aspecto. Debéis desechar toda idea de posesión. El Karma puede
arrebataros las cosas que más queráis y hasta a las personas que más améis. Aun
entonces debéis permanecer alegres, dispuestos a separaros de todo. A menudo el
Maestro necesita verter Su fuerza sobre otros por medio de Su discípulo e
incondicional servidor; y si éste cayese en la depresión no podría Él realizarlo. Así, la
alegría debe ser vuestra norma.
5ª aspiración única.—El objetivo que debéis tener a la vista es realizar la obra del
Maestro. No debéis jamás olvidarla, cualesquiera que sean las ocupaciones que os
salgan al paso, y ninguna otra labor puede interponerse en vuestro camino, porque
toda la que sea fecunda y desinteresada es labor del Maestro, y debéis ejecutarla por
amor a Él. Además, debéis poner toda vuestra atención en cada parte de la misma,
para que la hagáis lo más perfecta posible. El mismo Instructor dijo también: "Sea lo
que fuere que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres.
Pensad cómo ejecutaríais una obra si supieseis que el Maestro ha de venir a verla; así
debéis realizar toda labor." Los más conscientes sabrán mejor lo que este versículo
significa. Y hay otro semejante y mucho más antiguo: "Esfuérzate tanto como puedas
en cumplir cualquier cosa que se te presente."
Aspiración única significa también que nada deberá jamás desviaros, ni siquiera por un
momento, del sendero en que habéis entrado. Ni tentaciones, ni placeres terrenales, ni
mundanos afectos deberán nunca apartaros de él. Porque vosotros mismos debéis
identificaros con el Sendero, el cual ha de formar parte de vuestra natulareza, de tal
modo que lo sigáis sin necesidad de pensar en él ni en la posibilidad de abandonarlo.
Vosotros, la Mónada, lo habéis decidido; desprenderos de él equivaldría a
desprenderos de vosotros mismos.
6ª confianza.—Debéis confiar en vuestro Maestro; debéis confiar en vosotros mismos.
Si ya habéis visto al Maestro, confiaréis del todo en Él a través de vidas y muertes. Si
aún no Lo habéis visto, debéis tratar de imaginároslo y confiar en Él, porque si no lo
hiciéreis, no podrá Él ayudaros. Sin completa confianza no puede establecerse la
perfecta corriente de amor y de poder.
Debéis tener confianza en vosotros mismos. ¿Decís que os conocéis bien a vosotros
mismos? Si tal creéis, no os conocéis; tan sólo conocéis la débil corteza externa que
con frecuencia cae en el cieno. Vosotros, vuestro Yo real, es una chispa del propio
Fuego Divino; y como Dios, que es omnipotente, está en vosotros, nada hay que no
podáis hacer si queréis. Decíos: "Lo que hizo un hombre, otro hombre puede hacerlo.
Yo soy un ser humano, más aún, soy Dios en el hombre: puedo y quiero hacerlo."
Porque vuestra voluntad debe ser cual acero templado, si queréis hallar el Sendero.
IV
El Amor es la cualidad más importante, porque cuando es bastante fuerte en un
hombre, lo estimula a revestirse de todas las demás, que sin ella nunca serían
suficientes. Suele definirse el amor como un intenso deseo de unión con Dios y de
liberación de la rueda de nacimientos y muertes. Pero este concepto del amor suena a
egoísta e implica sólo una parte de su significado. El amor es más que deseo; es
voluntad, resolución, determinación. Para producir este resultado, la resolución debe
llenar vuestra naturaleza entera, hasta el punto de no dejar lugar para ningún otro
sentimiento. Es, sin duda, la voluntad de ser uno con Dios, no para escapar del
sufrimiento y de la fatiga, sino a fin de que, en razón de vuestro amor profundo hacia
Él, podáis obrar con Él y como Él obra... Pues siendo Dios Amor, si queréis llegar a ser
uno con Él, debéis también estar poseídos de amor y perfecto altruismo.
En la vida diaria, esto significa dos cosas: primera, que procuréis cuidadosamente no
causar daño a ningún ser viviente; segunda, que siempre estéis alerta por si se
presenta la oportunidad de ayudar.
Primero, no dañar. Hay tres pecados que causan en el mundo mayores males que
todos los demás: maledicencia, crueldad y superstición, porque son pecados contra el
amor. Si el hombre quiere henchir su corazón de amor divino, ha de vigilarlos y
combatirlos constantemente.
Veamos los efectos de la maledicencia: Principia con el mal pensamiento, y esto en sí
mismo es ya un crimen. Porque en todas las personas y en todas las cosas existe el
bien y el mal. A cualquiera de éstos podemos prestarle fuerza, pensando en él, y por
este medio ayudar o estorbar la evolución; podemos hacer la voluntad del Logos o
trabajar en contra de ella.
Si pensáis mal de otro, cometéis tres iniquidades a un tiempo:
1a Llenáis el ambiente que os rodea de malos pensamientos en vez de buenos, y así
aumentáis las tristezas del mundo.
2a Si en el ser en quien pensáis existe el mal que le atribuís, lo vigorizáis y alimentáis; y
así, hacéis peor a vuestro hermano en vez de hacerlo mejor. Pero, si generalmente el
mal no existe en él y tan sólo lo habéis imaginado, entonces vuestro maligno
pensamiento tienta a vuestro hermano y lo induce a obrar mal, porque, si no es todavía
perfecto, podéis convertirlo en aquello que de él habéis pensado.
3a Nutrís vuestra propia mente de malos en vez de buenos pensamientos, y así
impedís vuestro propio desarrollo y os hacéis, a los ojos de quienes pueden ver, un
objeto feo y repulsivo, en vez de bello y amable.
No contento c on hacerse todo este daño y hacerlo a su víctima, el maldiciente procura
con todas sus fuerzas que los demás participen de su crimen. Les expone con
vehemencia su chisme, con la esperanza de que lo crean, y entonces los convencidos
cooperan con él, enviando malos pensamientos al pobre paciente. Y esto continúa día
tras día, y no lo hace sólo una persona, sino miles. ¿Veis ahora cuán bajo, cuán terrible
es este pecado? Procurad evitarlo en absoluto. No habléis jamás mal de nadie; negaos
a escuchar a quien os hable mal de otro, y decidle, afectuosamente: "Tal vez eso no
sea verdad, y, aunque lo fuese, es mejor no hablar de ello".
En cuanto a la crueldad, ésta es de dos clases: intencionada y sin intención.
La crueldad intencionada consiste en causar, de propósito, dolor a otros seres
vivientes, y éste es el pecado más grave de todos: obra de diablo más bien que de
hombre. Diréis que ningún hombre puede hacer una cosa semejante; pero
precisamente los hombres la han hecho muy a menudo y aún la están haciendo cada
día. Los inquisidores la practicaron, y también muchas gentes religiosas en nombre de
su religión; los vivisectores, así como habitualmente algunos maestros de escuela.
Todas estas personas tratan de excusar su brutalidad con la costumbre; pero un crimen
no deja de serlo porque muchos hombres lo cometan. Karma no tiene en cuenta las
costumbres; y el karma de la crueldad es el más terrible. En la India, al menos, no
puede haber excusa para tales costumbres, porque todos conocen el deber de no
acusar mal a nadie. El destino de los crueles cae también sobre aquellos que se
dedican intencionadamente a matar a las criaturas de Dios, y llaman a esto deporte.
Ya sé que tales cosas no las efectuáis vosotros, y por amor de Dios hablaréis
claramente contra ellas cuando la oportunidad se os presente. Pero también hay
crueldad en las palabras como en los actos, y una persona que diga una palabra con
intención de herir a otra es culpable de este crimen. Esto tampoco lo haréis vosotros;
pero algunas veces una palabra dicha al descuido hace tanto daño como una
maliciosa. Así pues, debéis estar siempre en guardia contra la crueldad no
intencionada.
En general, ello procede de la irreflexión. Hay hombres tan poseídos de la ambición y
de la avaricia, que ni siquiera se dan cuenta del sufrimiento que causan a los demás
pagándoles poco, o haciendo pasar hambre a su mujer e hijos Otros, pensando tan
sólo en su codicia, se preocupan poco de los cuerpos y de las almas, a quienes
arruinan por satisfacerla. Para librarse de unos cuantos minutos de molestia, un
hombre deja de pagar a sus obreros el día que les corresponde, sin acordarse de las
dificultades que este hecho les reporta. ¡Tanto sufrimiento se causa por descuido, por
olvidar cómo una acción ha de afectar a los demás!... Pero Karma nunca olvida, y no
tiene en cuenta que los hombres olviden los hechos.
Si deseáis entrar en el Sendero, debéis pensar en las consecuencias de vuestros
actos, para que no seáis culpables de crueldad irreflexiva.
La superstición es otro mal tremendo, que ha causado grandes y terribles crueldades.
Las personas esclavas de ella menosprecian a las que saben más, y tratan de
obligarlas a hacer lo que ellas hacen.
Pensad en la horrorosa matanza debida a la superstición de sacrificar a los animales y
al todavía más terrible prejuicio de que el hombre necesita alimentarse de carnes.
Pensad en el trato a que la superstición ha dado motivo con respecto a las clases
oprimidas en nuestra amada India, y ved cómo esta mala tendencia puede engendrar
una despiadada inconsideración, aun entre los que conocen el deber de fraternidad.
Los hombres han cometido muchos crímenes en nombre del Dios de Amor, movidos
por la pesadilla de la superstición; cuidad mucho de que no quede en vosotros ni el
más leve vestigio de ella.
Debéis evitar estos tres grandes delitos, porque son fatales a todo progreso, por ser
pecados contra el amor. Pero no tan sólo estáis obligados a refrenaros de este modo
ante el mal, sino que habéis de ser activos para el bien. El intenso deseo de servir ha
de llegar al máximo, hasta el punto de estar siempre a la mira para aplicarlo alrededor
de vosotros no tan sólo a las personas, sino a los animales y a las plantas. Debéis
prestar vuestro servicio hasta en las pequeñas cosas de la vida diaria, de modo que,
acostumbrándoos a ello, no podáis substraeros, cuando se presente la oportunidad de
hacer cosas de mayor importancia. Pues si deseáis llegar a ser uno con Dios, que no
sea para vuestro propio beneficio, sino para convertiros en canal por donde fluya Su
amor para alcanzar a vuestros semejantes.
El que está en el Sendero no vive para sí mismo, sino para los demás; se olvida de él
para poder servirlos. Es a manera de pluma en manos de Dios, por la que fluye Su
pensamiento y tiene expresión aquí abajo, lo que no podría suceder sin ella. Es a
manera de un canal de fuego viviente que derrama sobre el mundo el Divino Amor que
llena su corazón.
La sabiduría que os capacita para ayudar, la voluntad que dirige la sabiduría, el amor
que inspira la voluntad, éstas son vuestras cualidades.
Voluntad, Sabiduría y Amor son los tres aspectos del Logos; y vosotros, que deseáis
alistaros para servirlo, debéis, hacer gala de ellos en el mundo.
Quien la palabra del Maestro anhele,
De Sus mandatos póngase en escucha
Entre el fragor de la terrena lucha,
Y la escondida Luz atento cele.
Sobre el inquieto y mundanal gentío,
Del Maestro atisbe la señal más leve,
Y oiga el susurro que Su voz eleve
Del mundo entre el rugiente griterío.
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