miércoles, 30 de junio de 2021

El circulo secreto del Temple





El circulo secreto del Temple.

 Publicado por Joannes Karles 

 Ver blog Como muchos historiadores afirman, persiste una cierta certeza, o intuición, que dentro de la comunidad de caballeros que conformaron a la orden del Temple existía un grupo pequeño pero de tal trascendencia e importancia que manejaba los movimientos y devenir de la orden, en vista de su acción secreta es casi imposible encontrar pruebas directas de su existencia por tanto solo algunas evidencias dan a mostrar la posibilidad real de su existir, revisemos este punto en esta entrada a ver que conclusión nos trae el estudiar cierto texto y movimientos de la Orden de los caballeros pobres de Cristo. No sé si sea por el comportamiento mostrado en el proceso judicial en su contra y eventual suspensión de la orden, donde el silencio y la accion tardía en defensa de la misma fue muy extraño, o por otro lado la idea romántica que se fue gestando alrededor de los caballeros templarios, o la suma de ambas, la cuestión es que parece existir un detonante en la construcción y en el hacer verosímil la certeza, o intuición, que dentro de la comunidad de caballeros que conformaron a la orden del Temple existía un grupo pequeño pero de tal trascendencia e importancia que manejaba los movimientos y devenir de la orden. En mis reflexiones, algunas veces, me inclino a pensar que fue la postura del Barón Von Hund el detonante de esta, desde nuestro punto de vista, ensoñación en donde se describe a supuesto superiores invisibles manejando en su caso una Masonería Templaria, heredera de los superiores desconocidos que llevaban a cabo un papel similar en el temple. No sabemos a ciencia cierta, por lo menos los profanos en este asunto, que inspiró o en que se sustentó el Barón Von Hund, pero es él quien “… introduce en sus rituales una doble leyenda: a) su obediencia (la masonería rectificada) desciende de la Orden del Temple; b) la masonería escocesa es la obra de los Estuardos destronados (leyenda llamada jacobita). En 1764, la masonería rectificada y el capítulo de Clermont se reúnen en un convento en Altenberg; allí, Hund desenmascara a Johnson, que huye lastimosamente, mientras. sus discípulos se pasan a Hund, cuya Orden del Temple se llamará a partir de entonces «Estricta Observancia Templaría»”[1]. No es mi intención entrar en detalles en los asuntos de la Masonería y como esta se encuentra o no atada a la trama tan engorrosa como fue la que llevó a destronar a los Esturados, ni como a partir de esta familia real radicada en Francia comienzan a generarse obediencias dentro de la según recién creada hermandad especulativa, ni tampoco revisar como fue utilizada esta última, sea cierto o no, como instrumento por parte de la iglesia anglicana. Lo que sí es para nosotros de importancia es que este tipo de derivaciones; que no parecen sino más que eso; lo único que nos han dejado es la generación, más que espontanea, de supuestos herederos del temple formando, por mucho, expectativas en varios que al final, y lamentablemente, en la mayoría de los casos son defraudadas. No es secreto, y como presentamos en el capítulo anterior, que el temple parece pavonearse entre símbolos, no de su uso exclusivo, pero si empleados de forma sugerente por la orden, como denotando saberes que estarían en el fondo de la corriente ortodoxa o más allá de ella. Considerando esta idea podemos ver que uno de estos símbolos es el descrito en uno de los sellos del temple; hablamos de aquel que describe a Abraxas y rodeándolo por encima se lee la frase Secretum Templi. Este sello representa un cuerpo humano con cabeza de Gallo (símbolo de salutación al Sol) y piernas de Serpiente (intuición y comprensión por el conocimiento) Este sello fue encontrado en los archivos nacionales franceses (D. 9860 Bis.) y reproduce la imagen citada. Este sello usaría una iconografía eminentemente gnóstica “el nombre místico Abraxas (se afirma que el termino fue acuñado por el alejandrino Balsílides) se ha dicho que su significado en copto es “Sagrado Nombre” … o, como parece ser igualmente probable, se trata de la palabra del hebreo Ha-Brachah “Bendecido” … la figura simbólica que encarna la idea del dios Abraxas haciendo referencia al sol en todo sus componentes es también más que evidente.” ¿Qué hace un símbolo gnóstico como parte de un sello usado por los Templarios? ¿se refiere algun secreto en especial mantenido por la orden, cuando leemos la frase Secretum Templi? “Este abraxas servía de sello secreto a determinados dignatarios del temple…La curiosa inscripción Secretum Templi podría hacer pensar que dicho sello era privativo de un círculo interno de la Orden… Sin embargo, este sello secreto figura en un documento público de octubre de 1214… De todos modos, esto prueba la existencia de un órgano interno y secreto y confirma la declaración de cierto número de templarios”[2] Como vemos, para autores en este caso como Michel Lamy[3], la existencia de este sello, junto con otros hallazgos relacionados a inscripciones en piedras del tipo gnóstica, sería la clave, según él, para denotar la presencia de un círculo interno en la orden del temple. La verdad no vemos esto como prueba ultima que permita indicar la presencia de este tipo de grupo. Nos parece extraño que este mismo autor, que además cita y expone que este tipo de sello o representación del abraxas era usado por personas de la nobleza secular como Margarita de Flandes o los condes de Champaña, sin embargo mantenga la conclusión antes comentada[4], a esto se suma otros ejemplos como el caso de personas del clero secular “Nicolas, abad de Saint-Étienne de Caen, una victoria alada; en el pequeño sello de Hugues d’Amiens, (1148), un león y en su contrasello (1153 o 1154), un toro; en el de Henri, obispo de Bayeux (1164-1205) un Apolo; en el de Rotrou, arzobispo de Rouen, un Abraxas”[5]Lo que parece evidente es que este tipo de símbolos no era de uso exclusivo del temple, por eso es importante resaltar que al encontrarnos en la baja Edad media estaríamos en el lapso de tiempo en que sigilografía al igual que la Heráldica, y digámoslo abiertamente, con su claro hermetismo servían para elaboraciones simbólicas del más alto nivel con uso de figuraciones y descripciones las cuales eran tomadas no solo del orbe cristiano sino del judío, islámico y por supuesto de lo que se conocía o se sabía del mundo gnóstico también, y que eran usado en los sellos, entre otras cosas, como un instrumento de validación de los documentos. En los sellos, junto con los blasones, se hace evidente el uso de toda una serie de símbolos como los que muestran dos Yod unidas o el blasón de la Cabeza de Moro, o el águila bicéfala que parece más un Fénix que otra ave, vale acotar todo esto no era solo usado en escudos y estandartes. La sigilografía y la Heráldica fueron muy apreciada por la alta nobleza, la caballería, y claro está, también por la orden del temple, que al ser una orden de caballeresca no era ajena a figuraciones simbólicas comunes. A esto el lector puede plantear un contra argumento que estaría a fácil disposición y es que en los casi dos siglos de vida de la Orden del temple se desarrolla en el sur de Francia y norte de Italia una visión dualista del cristianismo con grandes matices gnósticos; esto sin acusar al temple de cátaro y estos últimos de usar símbolos como el abraxas, este gnosticismo podría ser una especie de influencia invisible pero poderosa la cual estaría permeando o tocando ciertos tejidos de la sociedad feudal y a su vez ciertos estamento dentro de la orden, a este razonamiento solo nos quedaría a replicar entonces, como antes dicho, que esto no sería un símbolo únicamente usado por la orden y mucho menos prueba fehaciente de la existencia de una orden interna No podemos descartar que el uso de este tipo de simbología y la descrita en el capítulo anterior, fue de interés para algunos individuos dentro de la orden; lo que no los hace los maestros de las marionetas, muchas de las acciones anónimas de estos individuos haría casi imposible encontrar pruebas directas de la existencia de arcanos y saberes dentro de la orden, sin embargo solo algunas evidencias dan a mostrar la posibilidad real de su existir, no de una orden como tantos creen, sino tal vez, y como ya comentamos al final del capítulo anterior, la presencia de un grupo de hombres, caballeros, ancianos, o capellanes, los cuales podían ostentar un grado de saber diferente al resto de sus hermanos, pero no, y vuelvo a insistir en eso, seria necesariamente la prueba de la existencia de un círculo interno, una orden dentro de la orden la cual manejaría los hilos de la misma y que según habría realizado algun tipo de escisión muchos años antes que ocurriera la desaparición de la caballería de Temple[6]. Revisemos entonces esta “polémica” con el objetivo de distinguir cuanto de realidad hay en esto y que conclusión nos trae el estudiar ciertos textos y movimientos de la Orden de los caballeros pobres de Cristo. Titulo sospechoso Para poder avanzar en esta tarea, especulativa ciertamente, me avocare a revisar que simbolismos y pistas se pueden extraer en escritos asociados a la orden, como el Laude novae militiae u otros que no fueron aparentemente influenciados por el temple, pero en donde ellos aparecen como actores de importancia, como son los romances y novelas de Graal. En este sentido me permito en dar un potencial nombre a este grupo, que no es invención mía ciertamente, pero que la primera vez que lo vi fue bastante sugerente, para ello me serviré del nombre que aparece en un libro del estimado Jesus Ávila Granados[7] y mantendré el título de los Hijos del Valle, es difícil saber si en realidad estos singulares caballeros o miembros del Temple poseían un nombre que los identificase, pero si es sugerente que un título o denominación como esta fuera usada. A este respecto tenemos “la transposición del “valle de Josafat” para ciertas locaciones geográficas occidentales. De esta manera, el valle de Josafat en la región de Chartres, asociado la región a las encomiendas templarias de Beauce, tomaría su nombre de la abadía de Josafat, fundada en 117 por el obispo de Chartres, esa denominación es dada por Geoffroi de Leves y Gosselin… Encontramos nuevamente, en la misma región, entre Bouville y Maisse; se trata entonces de un “valle de Josafat” cercado de lugares curiosamente bautizados”[8]. Como vemos la presencia de ciertas encomiendas en donde el nombre del valle de Josafat aparece de forma explícita, por tanto hay un claro uso del nombre de esta locación siendo usado en occidente por parte del Temple, tal es que Jean Tourniac sugiere “Un mapa de los “valles de Josafat” debería ser hecho, no apenas en Francia, sino también en Alemania, tomando como puntos de referencias las encomiendas templarias o teutónicas”[9]. Por tanto no es esto algo extraño al Temple como hemos visto, pero tiene también su presencia en documentos fundacionales de la misma. Perceval llegando al valle En este orden de ideas si revisamos el manuscrito escrito por el primer Santo templario (si lo podemos calificar así) y me refiero a Bernardo de Claraval, titulado De laude novae militiae ad milites templi[10] en él se habla de la geografía de tierra santa, y como ya adelantamos existen al menos unos tres o cuatro capítulos con posibles significaciones de corte esotérico o que guardan otro alcance. En este sermón se hace alusión aspectos y virtudes de los caballeros, dentro de esto se habla del valle de Josafat, probablemente de donde tomarían su nombre estos supuestos conocedores de saberes particulares dentro del Temple, insisto si es que en última instancia se denominaron a ellos mismo de esta forma. Sobre él el santo cuenta, en el capítulo VIII: “Se sube al Monte de los Olivos, y al bajar entras en el Valle de Josafat. Así puedes ir pensando en los tesoros de la divina misericordia, pero sin ocultar tu temor al juicio de Dios”. ¿Que exhorta aquí San Bernardo?, es un capítulo con significación escatológica, donde exige a los caballeros exámenes de conciencias y juicios sobre si mismos, pero también con el objetivo de recibir el juicio que les hará Dios y para el cual es necesario haber muerto, por tanto la idea de la muerte está presente y se esboza en el capítulo XI el Sepulcro, pero también se encuentra la trascendencia y con esto el “tesoro de la divina misericordia”, del mismo modo el santo nos habla de llegar a una cima, que podemos ver claramente como lo exotérico o externo, y bajar a lo más oculto y de allí ir pensando en el premio antes mencionado, ¿a que alude? ¿Será a algo oculto?, deteniéndonos en el Simbolismo “con frecuencia, en mitos, leyendas y cuentos folclóricos, el tesoro se encuentra en una caverna. Este doble símbolo significa que la cueva (imagen materna o inconsciente) contiene el tesoro difícil de alcanzar… El tesoro que el héroe conquista con su dolor y esfuerzo es el mismo renacido en la caverna en que lo habían sumido la introversión o la regresión”[11] si bien en este capítulo Bernardo habla de forma explícita del valle, no se puede dejar de lado que al asociarlo con el tesoro se podría tender la analogía de lugar oculto como la cueva, pero también puede llevarnos en la dirección de lo que más adelante escribirá cuando se refiera al sepulcro. De este modo podemos ver que un valle, considerando la toponimia de un lugar, posee una baja altura en consideración al paisaje aledaño y está rodeado de colinas o montañas, por tanto, oculto, en este sentido y por lo antes dicho seria aquí donde el héroe caballero se sumiría en ese esfuerzo para un renacimiento, lo que no sería otra cosa que una iniciación ¿puede ser esta otra referencia oculta de las tantas que tiene el Elogio a la milicia del santo de Cister? ¿Será por este mensaje clave que se habla del grupo interno bajo este nombre los hijos del valle, hijos del saber oculto? Si continuamos este viaje y tomamos por un momento el nombre del personaje principal de El cuento del grial veremos que este hace referencia también al valle “el val con el que finaliza el nombre, el que es el lugar donde se encuentra el castillo. Hacia el valle dirige Perceval su mirada después de subir la roca y allí ve aparecer por vez primera las torres del castillo. Per-ce-val podría aludir a agujerar el valle (Percer le val = penetrar en los secretos del valle)” [12]es imposible desligar al Grial de los templarios, o por lo menos los romances que se escribieron entre el siglo XII y XIII, y si tomamos la filología del nombre Perceval parece claro que trata de aquel que penetra en el secreto en este caso representado por el valle ¿y no es esto a lo que alude San Bernardo de lo que tiene que hacer el Templario para conseguir los “tesoros de la Misericordia”? ¿Qué debe entenderse por el valle? El valle, símbolo por excelencia del monje cisterciense de la observancia benedictina, se convertirá en el paso obligatorio de los caballeros medievales en busca del Santo Grial, como Perceval (literalmente lo que pasa por el valle) o Parzival, o incluso Perlesvaux en inglés y es que así como el desierto es para el anacoreta de medio oriente, el valle es para el monje en Europa, el lugar de expiación, de encuentro consigo mismo con el tesoro, “el valle es el símbolo de la misma vida, el lugar místico de los pastores y de los sacerdotes”[13]. Se hace claro que tanto de Troyes como Eschenbach con el nombre de Perceval o Parzival darían un grado de saber o bien lo colocarían como un “iniciando” al personaje principal de sus romances, además de esto es llamativo que al final del nombre de San Bernardo se haya incorporado el Claraval, lugar donde fundo su monasterio que puede verse como Clara-Vallis, o Valle de Luz, ¿no es esto un poco sugerente?, y perdone el lector si estamos atando cabos que no debemos pero todo esto parece demasiada casualidad, como ya comentamos Bernardo junto con otros, y destaco a Estaban de Harding, parecen ser los artífices del Temple, y me es sugerente que fundando su abadía en Claraval nos daría un señuelo relacionado en que él y su grupo poseían o buscaban algo quizás un saber que fundamentaba la misión de los caballeros y de la cual Chretien y Wólfram serian no más que agentes de propaganda. ¿Podemos por lo tanto desestimar que sea este apelativo valido para algunos dentro de la orden?, no podemos contestar de forma negativa a esta interrogante, pero aún queda la duda si de verdad existió un grupo dentro de la orden con algun tipo de saber que no era del dominio del resto, en cambio sí es claro que el uso del simbolismo del valle es propio también del monacato benedictino, y el Temple en mayor o menor medida es hijo de este monacato, via Cluny, Citeaux y con San Bernardo como ejecutor de la regla que entregara a los caballeros del convento blanco [1] Faivre, Antoine Esoterismo del siglo XVIII. Editorial Edaf 1976. [2] Lamy, Michel La otra historia de los Templarios (Madrid.: Martinez Roca 2004) [3] Lamy, Michel Op. Cit. [4] Lamy, Michel Op. Cit. [5] Bloche ,Michaël. Les sceaux des abbés et du convent de la Trinité de Fécamp, XIIe-début du XIVe siècle The seals of Abbots and of the convent of the Holy Trinity in Fécamp, 12th-beginning of the 14th century La revue Tabularia, https://journals.openedition.org/tabularia/1314 [6] No comprendo como investigadores, como en el caso de Michel Lamy, que presentan amplias revisiones de documentos fidedignos se hacen eco de un suceso particular en la historia entre Francia e Inglaterra para confirman la supuesta separación del inexistente Priorato de Sion, que es el producto de una de las más grandes mentiras del siglo XX. A lo que me refiero fue a un suceso acaecido en 1188, según las leyendas después de una fuerte discusión entre Felipe Augusto y Enrique II, el primero dispuso el derribar un muy antiguo olmo ubicado cerca de la famosa fortaleza de Gisor, este árbol era muy estimado por los Normandos, pero el punto es que, y como nos cuenta Jean Markale “ bajo el pretexto de un parentesco entre el nombre del árbol ( olmo es orne en francés) y que un cierto Ormus, un supuesto místico egipcio que fue hecho cristiano por San Marco y que se convirtió en fundador de una secta Gnóstica, fue imaginado que al derribar el olmo se simbolizó la separación de la Orden oficial de los Templarios y un fantasma “Priorato de Sion “ que era parte integral de la orden Templaria desde sus orígenes hasta este trágico día de 1188” , derivaciones esta que solo dañan el buen trabajo de unos cuantos investigadores [7] Granados, Jesús Ávila La Mitología Templaria. Planeta Colombiana 2003 [8] Tourniac, Jean Da cavalaria ao segredo do Templo. Madras 2011 [9] Tourniac, Jean Op. Cit. [10] Bernardo de Claraval Elogio de la nueva milicia templaria, Ediciones Siruela 2005 [11] Cirlot, Victoria Figuras del destino. Mitos y simbolos de la Europa medieval. Ediciones Siruel a 2005 [12] Cirlot, Victoria Op. Cit. [13] Cirlot, Victoria Op. Cit.

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