LOS CABALLEROS DE LA ORDEN DEL SOL

Akhenaton: Faraón De Egipto:
(¿Murió por creer en un sólo Dios?)
Parte 3:

Serán preservados hasta la milésima generación. ¡Tal como está escrito, así deberá hacerse! ¡La GranFuerza guardará el Convenio y la Lealtad con aquellos que aman y guardan los Mandamientos y así, recorren el camino de la Paz!

Y sucedió que los Hebreos y los Israelitas no se establecieron hasta después de una larga jornada por el desierto. Ellos deambularon por cuarenta años. Generaciones pasaron y la gente no abandonó su costumbre corrupta de 'Ofrenda de Sangre' en la celebración de El Aton. De nuevo la gente dio su espalda a la GranFuerza que los liberó del Yugo de la Casa de Egipto. La GranFuerza resolvió de nuevo doblegar las espaldas de la Casa de Israel. La Casa de Israel fue sometida bajo el Yugo de Roma.

Una vez los Hebreos y los Israelitas escaparon de la esclavitud de Egipto, la palabra Esenio volvió a ser oída de nuevo. Esto fue porque muchos hebreos y unos pocos Israelitas todavía recordaban a la decimotercera tribu. Ellos intentaron mantener vivas las enseñanzas de la Gran Hermandad Blanca y se llamaron Esenios a sí mismos. Retuvieron algo de la sabiduría, pero no lo suficiente como para que nosotros los llamáramos Esenios De Arkashea. Tanto sus propósitos como sus preceptos estaban demasiado lejos de los originales.

Así, con la liberación de las personas de la tierra de Hebron, llegaron a existir tres sectas de Esenios.

1. Los Esenios que eran Hebreos,
2. Los Esenios que eran una parte de la gente de Israel,
3. Los originales, los Esenios De Arkashea.
Cuando veas la palabra Esenio (Essene) impresa o la escuches expresada por alguien, las desigualdades son tan grandes que seguramente ellos están refiriéndose a los Esenios Judíos y no a los Esenios de Arkashea. Lo más probable, es que ellos nunca han oído ni de los Esenios de Arkashea ni de los Esenios Hebreos.

Con el tiempo, la mayoría de los Hebreos regresó con su gente. Aquellos que escogieron permanecer, fueron convertidos—ellos se habían vuelto Israelitas en sus corazones.

Las personas de Israel cayeron de nuevo en la esclavitud. Toda la tierra de Judea fue capturada por Asiria. El rey de Asiria, con el fin de gobernar más fácilmente a la gente capturada, ordenó que todos en Judea seguirían la misma religión—la de las personas de Judea.

Así, la gente de Israel se volvió conocida como los judíos, porque ellos [las personas de la tierra de Judea] eran ahora de una sola gente, una sola religión, un solo estilo de vida. Así, por orden del rey de Asiria, las personas de la tierra de Judea se volvieron conocidas como los judíos y su religión se conoció como el Judaísmo.

Después de que el reino Asirio perdió prominencia, los judíos fueron capturados por los Romanos. Los judíos llamaron Israel a la tierra que ocupaban en ese entonces—significado ‘las personas eternamente escogidas’. Los judíos habían soportado a los Egipcios, a los Asirios, su propia disputa interior y ahora estaban soportando el poder de Roma. Los judíos fueron oprimidos penosamente. La ocupación romana podría compararse a la de Alemania Nazi, de muchas maneras.

En ese momento, un nuevo maestro vino de los Esenios de Arkashea. Su nombre era Yahweh (Yahvé)—pero el mundo lo conoce como Jesús. Él decidió hacer algo sin precedentes entre los Esenios de Arkashea. Él decidió enseñar públicamente las Costumbres Esenias (Essene ways). El Maestro Jesús intentó mostrar a los Judíos (y a otros) que la única manera de lograr la paz era tratando a cada hombre como hermano. De nuevo, así como Akhenaton, Jesús intentó hacer un nuevo principio. A través de la parábola y el ejemplo, él enseñó las costumbres de un corazón pacífico y amoroso. Él intentó reunir a los Judíos con la GranFuerza mediante el cambio en las actitudes de los sacerdotes.

Ahora, este nuevo maestro de los Esenios de Arkashea no creía en el aislamiento de la GranFuerza. El nuevo maestro era un Hermano Esenio, un maestro de la Tierra, un hombre llamado—por los griegos—Jesús. . . un rabino joven nacido de la Casa de David. Con la bendición de la Gran Hermandad Blanca, el Maestro Jesús enseñó públicamente la necesidad de amar a todos los hombres como hermanos. Jesús, siendo también un maestro del nivel de los Hermanos de la Cadena de las manifestaciones de la FuerzaVida en la Tierra, intentó enseñar a otros que eran menos afortunados, quienes tenían menos entendimiento, que sólo siendo 'hermanos' cada individuo puede, a su vez, encontrar la 'paz'.

Las Enseñanzas del Esenio, el Hermano Jesús, cayeron en oídos sordos. Las espaldas de la gente de Israel estaban penosamente doblegadas en su cautiverio. Un rey fue impuesto sobre ellos por el poder de Roma—Herodes. Un rey corrupto, que mató a su hermano y llevó a la esposa de su hermano hasta su propia alcoba. Su hija Salome bailó ante el rey por la cabeza de Juan—el Bautista.

La relación entre Herodes y la nación judía, siendo él mismo un judío, revela que los Judíos continuaron siendo una casa dividida entre ellos. Herodes sólo se preocupaba de sí mismo y de sus propios placeres. La condición de sus compañeros Judíos no le importaba para nada, con tal que su vida fuera confortable.

Los judíos, para su parte, conocían la conducta corrupta de Herodes. Ellos conocían su abuso de poder. Así que no le dieron ningún apoyo. Él era un rey despreciado por su propia gente.

Los así llamados, santos varones de Israel, corrompieron aún más a la gente exigiendo el sacrificio de una ofrenda pura—un animal que sólo los sacerdotes del Templo podrían proporcionar. Ellos corrompieron el significado de 'ofrenda' ante la GranFuerza. El significado original para el término 'ofrenda' era comunicarse desde el corazón con la GranFuerza—una acción de gracias por la experiencia de Vida. Los sacerdotes del Templo de Israel adulteraron el significado al hacer que la ofrenda fuese la 'sangre' y la 'vida' de una forma de vida más baja. La carne del animal asesinado debía dejarse, para que los hombres del templo pudieran cenar con el dolor de la labor de otros. De hecho, ellos estaban vacíos ante la Faz de la verdad.

Así, el sacerdocio se volvió adinerado a expensas de sus hermanos. Por este tiempo no había quedado, en absoluto, virtualmente ninguna espiritualidad en los templos. Todo lo que permanecía era religión—control mental, búsqueda de poder, y satisfacción del ego excesivo. La hipocresía, rectitud sólo hacia sí mismo, ego excesivo y poder, eran los verdaderos dioses de este templo.

El nuevo maestro—Jesús—intentó de nuevo proteger a los hombres de la tempestad. Intentó enseñarle a la gente común a protegerse de sus costumbres de ira. Trató de inducir una reunión entre Israel y su decimotercera tribu perdida. La corrupción de las personas era grande. Aquellos que eran responsables de la justicia del hombre común también eran responsables de sus almas. En su gran miedo de perder su poder político, buscaron a un miembro del grupo de Jesús. El hombre, un Zelote llamado Judas, negoció la vida del Maestro Jesús. Vacío en comprensión, Judas no entendió que las enseñanzas de Jesús no eran de la infestada tierra Romana. Eran enseñanzas del corazón. Un camino hacia la paz.

En un arrebato de piedad, Jesús intentó de nuevo proteger a los hombres de la tempestad, revelándole a los hombres del templo los contenidos de una 'visión'. De hecho Israel se había prostituido. Una prostituta que rendía culto a una casa vacía. No sería hasta que Israel aprendiera a llorar, que sus corazones podrían permitirle a la GranFuerza volver a entrar. El templo de Israel sería arrasado. No habría más Israel. "¡Cambien! Acepten las enseñanzas de la GranFuerza mientras haya tiempo. " Todo cayó en oídos sordos. Los hombres de poder desearon más conservar su poder que sus almas. "Oigan la justicia de la GranFuerza" lloró Jesús en el templo ante los hombres de poder, que "El templo de Israel se lanzará hacia el Infierno de sus propios pensamientos" dijo él, con lágrimas de desesperación ante el dolor súbito de reconocimiento que todos en el templo se habían condenado al olvido. Sólo un hombre sería salvado, si él dejaba el templo de la oscuridad y no retornaba jamás a la vida pública.

Así, el Maestro Jesús intentó mostrarle a los lideres de las doce tribus voluntariosas la salida del infierno de sus propios pensamientos. Él reveló a los sacerdotes la magnitud de su corrupción. Él les suplicó que dejaran sus costumbres abominables como la práctica del sacrificio de sangre, que dejaran su lujuria por el poder y el dinero, que dejaran su creencia en ellos como las únicas personas escogidas por Dios. Él les imploró que volvieran a las verdaderas enseñanzas de la GranFuerza.

Todo el sacerdocio, excepto uno, rechazó completamente sus enseñanzas. Ellos estaban ya demasiado alejados. Ya no tenían la suficiente honestidad para admitir, al menos ante sí mismos, puesto que no sería posible que lo admitieran ante otros, que ellos valoraban el materialismo sobre todo lo demás. A través de su propia falta de crecimiento, se habían consignado a sí mismos en el olvido. Solo uno, quien dejó el sacerdocio, escapó de este destino horrible.

El tiempo pasó y el día Sabático (día sagrado) se aproximaba. Jesús iba a entrar en la ciudad de Jerusalén. Los hombres del templo eran de hecho cáusticos en su juicio. Ellos resolvieron descubrir al falso testigo ante el poder de Roma, y ante su rey—Herodes.

El Esenio, Maestro Jesús, fue más tarde encontrado en un jardín con sus seguidores y fue llevado ante el poder del Sanedrín (Consejo). Allí, fue acusado de intentar derrocar el poder de Roma. Ellos torcieron Sus propias palabras hacia nuevos significados—un significado de su propia creación para servir a su propósito corrompido. No deseando llevar más allá el enojo de las masas, y encontrándose sin el poder, ellos mismos, bajo la protección de la noche, llevaron a Jesús para ser juzgado por su rey, a quien ellos odiaban—Herodes. Herodes, también se negó a ceder ente sus deseos enfermizos. Devolvió a Jesús al poder de los hombres del templo. Ellos, a su vez rogaron al Poder de Roma que juzgara a Jesús. Pilatos, intentando liberar al rabino inocente, dejó la opción en manos de las personas de la ciudad. Los hombres del templo impulsaron a la muchedumbre a forzar un juicio contra Jesús. Él fue, como era la costumbre de la justicia Romana, crucificado en una cruz que Él mismo, debió llevar hasta el sitio de Su muerte.

Y he aquí, puede haber sido una cruz romana en la que Él murió, pero no fue la justicia de Roma la que lo mató. La fuerza que lo mató fue el estado de la justicia en Israel.

Hoy,—el segundo viernes del cuarto ciclo de la luna desde el nuevo principio de la jornada de Tierra sobre el Sol—,es un día de duelo. Hoy, los necios de la Tierra han repetido de nuevo su locura. Hoy, el hijo de nuestra sangre—el Maestro Jesús de Belén, nacido de José de Nazaret, semilla de la Casa de David, hijo de María—fue llevado a la muerte en una Cruz romana por el poder de Roma, pero fue puesto en esa cruz por la traición de Caifas del Sanedrín. De hecho, Jerusalén rinde culto a una casa vacía. No será hasta que Jerusalén aprenda a llorar por todos sus actos erróneos que aprenderá el significado de la 'Paz'.

Hoy, nosotros—descendientes de la Hermandad Blanca—lamentaremos este acto erróneo para siempre. La Casa de Jerusalén será arrasada. Mientras la base de Jerusalén viva en la Traición, ‘so shall she be reseeded by her deeds’ (así será con su descendencia por sus actos – sus hijos, los hijos de sus hijos, los hijos de los hijos de sus hijos y toda su descendencia, deberán cargar con el karma, la indignación y la condena que fue creada por la comisión del acto original)

Su gente será puesta en cautiverio así como nuestra sangre fue puesta en cautiverio. Su gente será esparcida por la Fuerza de la oscuridad, así como nuestra sangre fue esparcida a lo largo del camino del Calvario. Sus personas serán azotadas y las carnes desolladas así como sucedió con nuestra sangre en la cruz romana del Sanedrín, con el mismo propósito.

La GranFuerza no mirará sobre la gente de Jerusalén hasta que el acto sea enmendado. Las Leyes de la Creación exigirán sangre por sangre. Está dicho que un hombre puede usar la grandeza de su corazón para perdonar el mal hecho contra él. Y, haciendo esto, él se libera del giro de la rueda. ¡Pero! ¡El karma no perdona nada!

Hoy, y en este día al final de cada año, nuestra gente recordará. Ellos deben, en sus corazones buscar comprensión a los sucesos de la época. Ellos buscarán comprender los actos erróneos de su propia creación, en la medida en que ningún hombre está libre de culpa tal que él pueda juzgar a otro. Ellos buscarán hacer bien lo que han hecho mal. Hoy es un día de duelo. Duelo por la sangre de nuestra gente, duelo por la tentación que nos lleva a los actos erróneos y duelo por aquellos que caminan en la terquedad de su propio corazón, porque ciertamente no conocerán la 'paz' hasta que aprendan a llorar. ¡De hecho, grande es el poder de Maya sobre el Hombre—¡tanto el varón como la hembra!.

Así, el maestro Jesús fue asesinado. Los Esenios de Arkashea lamentarán este acto erróneo para siempre. Nosotros debemos buscar comprensión, perdón y amor en nuestros corazones.

Es probable que la mayoría de los hombres no entienda la magnitud de este acto erróneo. El asesinato de ambos, Akhenaton y Jesús, fijó el tono para el futuro del Planeta Tierra. Ese futuro ha sido muy oscuro desde ese tiempo y continuará siendo así durante algún tiempo. El Planeta Tierra está mostrando a la GranFuerza que no quiere ayuda. El Hombre quiere permanecer en el infierno de sus propios pensamientos.

Cuando la última de las luces salga del Planeta Tierra, la Tierra será abandonada; La tierra se volverá una esfera apagada que flota en el espacio vacío. Nosotros sólo podemos esperar que el Hombre cambie de algún modo. Sólo podemos esperar que el Universo no dé su espalda por toda la eternidad. Ningún hombre puede decirle a otro cómo debe sentirse. Ningún hombre puede expresar totalmente la tristeza, el dolor, el enojo o el amor que él puede sentir. Cada hombre debe cargar con la responsabilidad de sus propias acciones y sus propios sentimientos. El que los auxiliadores espirituales sean usualmente asesinados en este planeta, muestra que la mayoría de los hombres no son hombres de paz. Muestra que el hombre matará todo aquello que amenace su estilo-de-vida escogido. Es el hombre el que debe cambiar. El hombre debe aprender a vivir en paz consigo mismo. Quizás cuando nosotros, los hombres, nos miremos como hermanos en lugar de vernos como adversarios, estaremos listos para aceptar la ayuda que el Universo quiere darnos.

He aquí, está escrito que incluso el tiempo no puede disminuir el poder de la verdad... Aquel que se alineó con los asesinos debe llevar el Karma por este asesinato. La única esperanza que un asesino tiene es la de aprender la habilidad de llorar por amor. Sin esto, ellos quedarán atrapados para siempre en el infierno de sus propios pensamientos. En cuanto a la casa de Israel, el tiempo será su juez.



Dónde está mi pasado, que yo debo encontrarme a mi mismo al borde de mi propio dolor... aunque los dolores sean el resultado de mis propios actos...

Dónde está mi pasado, de hecho... acaso no está escrito que Yo, por mi propio libre albedrío, crearé mis propias limitaciones... acaso no está escrito que son los actos de hoy los que gobernarán los actos erróneos del mañana...

De hecho, dónde está mi pasado, que yo me borraré del futuro que no deseo... De hecho, ¡ahí radica mi pasado!